José Antonio Gómez Novoa
Ventana Indiscreta: Nueva norma-lidad
Existen años escondidos en nuestra memoria, que brillan con la majestuosidad y hermosura de Faro Vilán, otros oscuros y tristes como este 2020. Ya saben los que me leen, que siempre busco el lado positivo de las cosas, pero hoy me he levantado, quizás negativo, quizás realista.
Durante el confinamiento, se hizo popular el mantra "de esta situación vamos a salir mejores", pero miremos a nuestro alrededor, las personas que antes eran buenas y solidarias, ahora son mejores, pero los malos, aunque minoritarios, se han superado, han sacado lo peor de sí mismos. En nuestro trabajo, en la calle, en las familias observamos comportamientos agresivos, irrespetuosos, intolerantes, y en las redes sociales, qué decir: información sin contrastar, mentiras, insultos, amenazas.
Discurso tan incomprensibles como estos: En el mes de abril, algunos independentistas difundían mensajes como el que el coronavirus "viene y es culpa de Madrid". O en junio, que unos "inmigrantes", que habían llegado a Cartagena o Fuerteventura, habían dado positivo en PCR, y se habían fugado. Ahora en el mes de julio, los de la extrema derecha achacan los contagios en Cataluña, a la incapacidad y desastre de la idealizada república catalana. Y, ¿qué decir?, los que esta semana deseaban que no le dieran un duro a España en las negociaciones del fondo de recuperación. Todo muy doloroso.
Lo lógico en una situación como ésta, es que apelemos al "nosotros", y ha funcionado siempre en situaciones de catástrofe: terremotos, incendios, inundaciones……, pero este volcán de emociones que nos ha traído el virus, hace disminuir nuestra confianza, nos encerramos mental y socialmente, y ello conlleva que algunas veces de modo inconsciente nos pongamos en riesgo a nosotros mismos y a los que nos rodean
Pero también los hay que de forma consciente, argumentan que prima el derecho a la libertad, que la enfermedad no es tan seria y tan grave como la pintan, o que es necesario buscar la inmunidad de rebaño. Respeto sus ideas, pero el "vivir en común", conlleva unas normas grupales, que se dictan para que nos comportemos de una forma determinada. Podemos compartirlas o no, pero debemos cumplirlas.
Siendo esto fundamental, más aún es, que prioricemos la necesaria solidaridad y empatía con el resto de ciudadanos. Si tú no quieres llevar mascarilla, guardar distancia de seguridad, esa decisión puede afectar gravemente a los demás. Por favor, no olvides la "importancia del otro".