Milagros Domínguez García
La puerta verde
"La puerta verde" es para mi un símbolo de cambio, logro y libertad. A través de ella querría enviar el mensaje a todas las mujeres víctimas de violencia, para que busquen esa puerta que las libere y tras la cual habrá personas que tenderán su mano para ayudarlas a conseguir el objetivo que no es más que vivir, vivir en paz.
Quiero agradecer a quienes siempre me apoyan y animan, que no hace falta que les mencione porque ya ellos saben quienes son.
A Rocio y Brais por tenderme su mano, por confiar en mi ciegamente y haber tenido la suficiente sensibilidad como para transformar un texto en imagenes con tanta rigurosidad, de forma altruista y sin ningún afán de protagonismo, sólo por convicción.
A Laura Pozaco una jovencísima bailarina con gran valía y sensibilidad capaz de crear una coreografía a través de un texto y, más tarde interpretarla poniendo todo su corazón de forma desinteresada, con la única finalidad de luchar contra la violencia de género.
Quiero dedicar estos dos trabajos a quienes están tras la puerta verde poniendo su mano para ayudarlas, su corazón para comprenderlas y su alma para no defraudarlas, porque los necesitamos para que ellas sepan que no están solas y que pueden romper su silencio y denunciar..