Ricardo Valongo
Me dan pena los sindicatos
Me dan pena los sindicatos.
Me dan pena porque deberían ser un elemento de ayuda al trabajador cuando sus derechos son pisoteados y se siente desamparado.
Pero es que ya no. Ahora lo sindicatos se han convertido en una puta vendida al amo (al estado, a las empresas, al poder...). Viven de subvenciones y de actitudes mafiosas (si no estás en tal o cual sindicato, olvídate de prosperar en tal o cual empresa).
¿Cómo van a defender al trabajador si maman de la empresa/estado? ¿Cómo nos defenderán si no tienen que romperse el pecho o la cabeza para defender a aquellos de quienes deberían vivir?
¿Y dónde aparecen ahora? En manifestaciones guerrilleras para montar barullo de vez en cuando a grandes empresas que les son incómodas, o en cursos de formación rodeados de gastos inexcusables y exagerados.
¿No podrían vivir los sindicatos y sindicalistas de las cuotas de los trabajadores? ¿No podrían realizar sus cursos sin contar con mamá estado o papá Europa? Ah, no, eso es demasiado trabajo para poco beneficio.
Yo de mayor sigo sin querer ser sindicalista, ni sindicado.