El impreciso reloj de la Peregrina marca el horario y el calendario de la Boa Vila

Pontevedra
09 de agosto 2024

Es el reloj público más antiguo que se recuerda en la ciudad y antes de ocupar el campanario de la Peregrina, en el año 1896, estuvo en el desaparecido hospital de San Juan de Dios, ubicado en la actual plaza de Curros Enríquez

Reloj de la Iglesia de la Peregrina
Reloj de la Iglesia de la Peregrina / PP de Pontevedra

Las campanadas del reloj de la torre Norte de la Peregrina con su habitual imprecisión y su clásico toque del Salve Regina cada mediodía a la hora del Ángelus o sus redobles de gloria los días de fiesta marcan el horario y también el calendario de Pontevedra. 

Es el reloj público más antiguo que se recuerda en la ciudad y antes de ocupar el campanario de la Peregrina, en el año 1896, estuvo en el desaparecido hospital de San Juan de Dios, ubicado en la actual plaza de Curros Enríquez. 

Nunca ha sido puntual y siempre ha dado problemas, dicen que por sus pesadas agujas que hacen que el eje de la máquina y sus engranajes de bronce se descompensen con facilidad con el viento.

El santuario de la Peregrina cuenta con seis campanas entre las dos torres, aunque sólo funcionan las que no tienen el reloj debajo, es decir las cuatro de la torre Sur (la de la derecha) que pertenecen a un carrillón cuyos repiques se entremezclan con los del vecino Convento de San Francisco o con las tres grandes campanas de la Basílica de Santa María, llamadas San José, Trinidad y Santa Bárbara.

Próximamente también volverá a dar la hora otro de los relojes clásicos de la Boa Vila, el de la Casa Consistorial, cerrada desde el año 2011. La prolongada reforma del viejo edificio del arquitecto Alejandro Sesmero incluye la reparación de este Morez, de origen francés, un reloj de péndulo muy parecido al de la iglesia de la Peregrina y que también cuenta con una campana que, además de marcar las horas, servía para convocar los Plenos.