Autor

Rafael FJ Rios

Rafael FJ Rios

Nogustándomela montonera de nada,de la suma de montonesme bajo; si tengo que agruparme, ni para
la lucha final; obligacionescon sello y póliza, pocas o ninguna.
Falta verdad y buen trato;
faltan sanas voluntades;
falta un gobierno barato,
ysobran Autoridades.
Ahunquecartujano,me adhiero a la nación comúny a su ley, fuente y reclamo de toda preocupaciónpor
ser quien es, la más alta bandera que a todos nos iguala.
Faltan de la patria amantes
faltan probos Regidores;
faltansabios Gobernantes,
y sobran Gobernadores.
Y ejerzo, protejo, admiro, proclamo, lucho y defiendo que no hay valor superior a la libertad, que todo lo
nutreyla vida ciudadananos asegura.Sinla libertad dejamos de ser.La libertad, Sancho, es unode los más
preciosos dones que a los hombres dieron los cielos..., por la libertad se puede y se debe aventurar la vida,
y, por el contrario, el cautiverio es el mayor mal que puede venir a los hombres.Libertad de cátedra, de
circulación, de comercio, de conciencia, de cultos, de empresa, de enseñanza, de movimiento, de
expresión, de imprenta, de información, de los mares, de residencia,libertad delespíritu, religiosa.
Libertad delengua,libertadciudadanaqueenvuelve labanderade la nación, libertad de pensamiento.
Libertad.
Libertades de todos y de cada uno, uno por uno,humanoasiento de la suprema soberanía nacional.
Falta lo que más recrea;
falta lo que es necesario;
falta lo que se desea,
y sobra lo innecesario.