A propósito de mi especialidad

21 de enero 2022
Actualizada: 18 de junio 2024

En los últimos años, los anuncios sobre seguros médicos privados han ido aumentando progresivamente, pero desde el inicio de la pandemia, su presencia es constante en todos los medios de comunicación y redes sociales. Sin ir más lejos, una empresa de telefonía acaba de lanzar su propia plataforma de salud, la cual promociona como Tu médico 24 horas. Atención primaria inmediata. ¿Es realmente Atención Primaria lo que ofrecen? Os voy a spoilear: no, por supuesto que no lo es

Estos días voy al centro de salud escuchando la radio y llego muy cabreada.

En los últimos años, los anuncios sobre seguros médicos privados han ido aumentando progresivamente, pero desde el inicio de la pandemia, su presencia es constante en todos los medios de comunicación y redes sociales. Sin ir más lejos, una empresa de telefonía acaba de lanzar su propia plataforma de salud, la cual promociona como Tu médico 24 horas. Atención primaria inmediata. ¿Es realmente Atención Primaria lo que ofrecen? Os voy a spoilear: no, por supuesto que no lo es.

Soy residente de Medicina Familiar y Comunitaria en Galicia, e ir a trabajar sabiendo que me espera una agenda diaria de 40-60 pacientes me pone nerviosa. No solo es el volumen de trabajo, que no favorece los espacios y tiempos de aprendizaje que debería tener con mi tutor, los cuales están reconocidos en un decreto de 2008 pero aún no han sido aplicados en mi comunidad autónoma (hecho que da para escribir otro artículo), es la certeza de que la presión asistencial va a condicionar la atención que damos a nuestros pacientes, limitando tareas de promoción y prevención de la salud, así como las actividades comunitarias.

Estamos asistiendo, desde hace años, a la desvalorización y desacreditación de la Atención Primaria, que es mucho más que "la puerta de entrada", es la vertebradora de nuestro sistema sanitario. Este hecho no es fruto de la casualidad, responde a una estrategia de privatización progresiva de los sistemas de salud, con el beneplácito de la clase política actual, la complicidad interesada de los medios de comunicación, el inmovilismo de la mayoría de las profesionales del sector y el silencio de una población convencida por la inmediatez y la especialización de la asistencia.

La atención primaria de salud se definió por primera vez en la Declaración de Alma-Ata de 1978, sin embargo, a lo largo de los años se ha reinterpretado y redefinido, por lo que la OMS ha elaborado una nueva definición (1) : es un enfoque de la salud que incluye a toda la sociedad y que tiene por objeto garantizar el mayor nivel posible de salud y bienestar y su distribución equitativa mediante la atención centrada en las necesidades de la gente tan pronto como sea posible a lo largo del proceso continuo que va desde la promoción de la salud y la prevención de enfermedades hasta el tratamiento, la rehabilitación y los cuidados paliativos, y tan próximo como sea posible del entorno cotidiano de las personas.

La salud es un derecho humano fundamental y es una Atención Primaria digna, universal y de calidad la que puede garantizarlo. Una Atención Primaria equitativa, que aborde (y no se desborde) los determinantes sociales de la salud, valore a la ciudadanía en el contexto de sus comunidades y potencie el empoderamiento de las pacientes, haciéndolas partícipes de todas las esferas de su salud.

Viendo como las gerencias y direcciones médicas están gestionando los recursos en esta pandemia, da la sensación de que las únicas que sabemos en qué consiste la Atención Primaria somos las profesionales que nos dedicamos a ella (y no siempre…). Este hecho es, sin lugar a dudas, un problema estructural que deriva de múltiples factores y condicionantes, entre los que cabe destacar la desinformación que tiene la población respecto a nuestras competencias y funciones, así como la falta de presencia de la especialidad en el ámbito universitario.

Si permitimos que los seguros privados usen el concepto de Atención Primaria para promocionar una asistencia a demanda 24/7, en algunos casos con la mera función de derivar a otras especialidades, permitimos que se nos trate como tal y, por tanto, contribuimos a la desacreditación de nuestra especialidad. Dejamos de ser médicas de familia y médicas comunitarias para ser burócratas derivadoras.

Me niego. Digo basta. Lo digo bien alto. Y espero no ser la única.

 

Alba Pons Revuelta, MIR de 4º año en el C.S. Vilanova de Arousa, vocal de residentes de AGAMFEC y futura médica familiar y comunitaria.

(1). OMS, UNICEF. A vision for primary health care in the 21st century: Towards UHC and the SDGs. https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/primary-health-care