República Galega

04 de diciembre 2024

Conforme los asistentes se acercaban al Teatro salían al paso unos tipos que al principio no se entendía lo que decían, pero enseguida supe que con frases cortas estaban lanzando insultos y amenazas. Comenzó el acto con la platea a rebosar, y no llevábamos ni dos minutos cuando desde las butacas sale un inmolao lanzando gritos, insultando, fuera de sí; de inmediato todos con gran regocijo le gritábamos que fuese a dar la tabarra al maestro armero. Seguimos. Echando un vistazo por la platea observo que, medio levantada del asiento y desde las butacas de delante, hay una tía que está ¡grabando con cámara de vídeo a toda la concurrencia! En nada salta otro dando voces, de pié, cerrando el puño, gritando... mientras duró la asamblea no menos de 6 ó 7 sacamantecas intentaron dinamitar aquella conversación sobre la libertad de lengüa. La camarógrafa no fue la única, hubo más simples que grabaron como en los mejores tiempos de la Stasi: verían luego la película con gran fruición, identificando entre los participantes de la asamblea a compañeros y profesores para luego montarles un círculo de tiza a su alrededor mediante la delación y el señalamiento. Aplicación al pié de la letra de los principios del agitprop del comunismo para enmudecer a todo aquel que se le oponga, que entronca perfectamente con el indignante recuerdo del ataque por parte de los jabalíes con lanzamiento de piedras y botellazos sobre una limpia manifestación por la libertad de lengua en Santiago. El abanico de las prácticas nacionalistas va, así, desde la señora Pontón defendiendo el ideario en el Parlamento, hasta estas camadas que hunden sus patas en el cieno. Hablando de cieno, hay que estirar más el arco hasta enfocar en la portada de la web de la upg el ensalzamiento de un tipo con pistola muerto en enfrentamiento con la policía en 1975. La dialéctica del terror. Hasta aquí llegan las prácticas del nacionalismo.

Como se mueven en términos marxistas, el nacionalismo está de paso en la sociedad democrática: participa en las instituciones con la vista puesta en su objetivo, y su objetivo no es otro que la conquista de un Estado independiente y socialista. Antes de llegar ahí van alcanzando etapas en las que el aumento de implantación social le acerque a la lucha final: República Galega, por ejemplo. ¿Qué y cómo es esto, hoy, cuarto de siglo del siglo XXI? Para responder correctamente hay que nombrar en primer lugar la organización UPG que dirige políticamente el movimiento, y que parece dirigirlo con una ideología embalsamada como la momia de Lenin, pues no sé si estará más cerca, p.ej., del partido comunista albanés de Enver Hoxha que de una sociedad abierta del siglo XXI en la que, mal que bien, estamos. Los motivos y los objetivos que mueven el nacionalismo parecen estar fuera de una sociedad democrática de respeto a la Ley y las libertades, puesto que para llevar a cabo su ideario tienen que destruir las instituciones del Estado, eliminar la Constitución, las leyes de la democracia, las libertades ciudadanas y por último construir fronteras. Implantar un régimen exige hacerlo de forma no democrática sino revolucionaria, esto es imponiendo sin ley democrática su única voluntad política: ¿qué régimen? ¿nicaragüense? ¿cubano?

Hay atajos. Está el método Grândola, Vila Morena que sirvió para tirar abajo la dictadura pero que por un tris no dio con los capitanes y con Otelo Saraiva de Carbalho -tan querido por la UMD- como tucán de la república comunista portuguesa para poner todos los claveles bajo sus botas. Si las masas -término marxista donde los haya, rebajada la ciudadanía a puro rebaño- salen a cantar por las calles, las instituciones quedan paralizadas, los representantes democráticos abdican de sus funciones... acaba mandando quien diga Grândola. ¿Y quién va a ser si las calles son las que van a dictar veredicto? República Galega.

Cuando hablamos de nacionalismo nunca hay que dejar de referirse a los que por excelencia se han erigido en motor y guía de la destrucción de la nación, por su propia actividad y, últimamente, a través de las transfusiones que el antiguo partido nacional psoe realiza para mantenerse vivo en el poder, siempre a cargo de la sangre del Estado, es decir, de todos los españoles. El nazionalismo vasco asesinó, robó, atacó, delató, señaló, como una perfecta organización totalitaria dedicada al terror en todas sus formas. Pero hoy el nacionalismo vasco cabalga sobre los muertos con gran maestría mientras miles de ciudadanos que no lo soportan están universalmente ignorados. En su día escaparon decenas de miles de ciudadanos y hoy el esquema de un país creado solo para ellos avanza de forma inexorable. Los nacionalistas toman el poder para utilizarlo en su único y exclusivo provecho, construyen país, pero solo su país. No fortalecen la sociedad democrática, no aumentan libertades, no se gobierna para todos, solamente se gobierna para los suyos, los demás no existen. Si en las Vascongadas se exiliaron miles, de Catalunya se escaparon cientos de profesores porque la lengüa nacionalista acaba convirtiéndose en un animal mitológico que, de un asunto normal, deviene en una patología, en una neurosis que el poder nacionalista transforma en lengua totalitaria, ariete que embiste a todos y nada sabe de tu libertad.

. está prohibido estudiar en español: Ciencias Sociales y Ciencias Naturales, Biología, Geología, Historia y Geografía.

. el español está prohibido por decreto como lengua de la administración educativa gallega. Se prohíbe a los profesores usar el español en documentación interna y de comunicación.

. boletines, actas, programaciones, rotulación, comunicaciones, etc., son monolingües en gallego,

. adoctrinamiento nacionalista en los libros de texto de Lengua Gallega,

. el español está excluido casi al 100% de la rotulación, documentación y campañas en la administración gallega, lo que incluye la Sanidad, la Educación y la Justicia.

. el español está excluido de las ayudas a los jóvenes creadores y en la cultura promovida desde la Junta.