No podemos desvincular la música con la evolución de seres humanos.
En la Prehistoria era el ánimo en rituales de caza, de guerra, de sus festejos; la basaba imitando ritmos y movimientos que observaban en los animales. Sus instrumentos eran de su cosecha: troncos ahuecados, objetos distintos, tambores e instrumentos variados.
En la evolución del ser humano, la música, la lírica fue su eterna acompañante. Pronto surgen las danzas con sus cánticos. En nuestra Galicia nuestra música recoge las costumbres de fiesta: la muiñeira, reuniones con baile ante los molinos; un punto de encuentro de jóvenes que buscan su media naranja.
No olvidamos a Perfecto Feijoo; funda Aires d’a terra, dando paso a las agrupaciones corales.
En nuestras riberas, en muchos de nuestros esforzados pueblos, después del duro y sacrificado trabajo, se reunían en sus cantinas, dando origen a las llamadas "Cantos de Tarbena".
Muchos de estos grupos se transforman en Corales y Orfeón.
Tocan, cantan en directo, usando típicos instrumentos: o pandeiro, la gaita, el bombo y otros utensilios. ¡Son valientes! No usan el playback, como muchos grupos musicales.
En nuestro entorno nos congratulan diversas corales, orfeón, bandas de música, grupo los Alegres… ¡Nos deleitan con su ingenio y generosidad!
Sábado, 21 de diciembre, a las 20 horas en el Teatro Principal nos deleitaron con diversas paxoliñas y otros cánticos de fantasía.


Iniciaron el evento El Orfeón Pontis Veterís, siguiendo la Coral Helénica Liceo Casino, bajo la maestría de Manuel Antonio Pintos.
Nos confortaron con la originalidad y ese toque mágico que impregna nuestro Maestro Manuel Antonio Pintos.
Todas las paxoliñas fueron muy aplaudidas y armoniosa actuación. En mi modesta opinión, destacaría "Toca O Pandeiro Manuel" y "Unha Noite Na Eira do Trigo". Fueron muy aclamadas y valoradas por un grupo de entendidos en esta enigmática musicalidad.

Finaliza este concierto navideño, La Coral El Chopo, dirigida por Julio Vázquez Martínez. Encandilaron y nos llevó a nuestra infancia con su "DO RE MI", nostalgia de Sonrisas y Lágrimas.
Nuestras más sinceras felicitaciones.
Siempre he sentido un gran respeto por todas las agrupaciones musicales. He conocido grandes cantores, directores, compositores. Todos fueron creativos y dejaron sus huellas en las diversas musicalidades.

A Manuel Antonio Pintos lo conocí en junio del 2018, en el Teatro Principal, que había musicado un poema "Naufragio" de Rafael Pintos Méndez, con la Coral Helénica Liceo Casino. ¡Me impresionó!
Tuve contacto con él y descubrí una persona sencilla, llena de humanidad y esclavo de la grata musicalidad. Siempre cantó desinteramente en centros de soledad, de personas con discapacidad. Este año lo sigue haciendo con su entrañable familia: Orfeón Pontis Veteris y Coral Helénica Liceo Casino.
Su gran preocupación es que todos…., tenemos una edad. Intenta que se agrupen nuevas personas; todas serán bienvenidas.
Su gran trabajo artístico no lo podemos enviar al exilio. Hemos de luchar para que siga perdurando y nuestras nuevas generaciones no se olviden de sus raíces. ¡Es meritorio del Premio Amigos de Pontevedra!
¡Cuidado con los inocentes! Mis sinceras felicitaciones del AÑO 2025, que nos traiga salud, concordia y amistad.
Pedro de Lorenzo y Macías.
Fotografías: Sofía Lorenzo Gómez.