Llegó Valeria. Celebremos la vida

19 de abril 2023
Actualizada: 18 de junio 2024

Quiero darte la bienvenida cómo te mereces porque, a pocas horas de haber llegado a nuestras vidas y aún sin haberte visto de cerca, sé que te voy a querer mucho ya que desde el primer momento que supe que ibas a venir te consideré algo mío

Hola, Valeria. 

 

Quiero darte la bienvenida cómo te mereces porque, a pocas horas de haber llegado a nuestras vidas y aún sin haberte visto de cerca, sé que te voy a querer mucho ya que desde el primer momento que supe que ibas a venir te consideré algo mío.

 

Sé que eres una niña afortunada porque tienes a una madre y un padre que son personas estupendas que te darán lo que más necesitarás para este viaje que inicias y que no es otra cosa que muchísimo amor y una educación llena de valores con la que sé que te convertirás en una gran mujer, pero antes serás una niña plena porque, querida mía, llegas a un lugar donde somos muchos los que te vamos a querer y proteger.

 

No puedo negar que tengo muchas ganas de cogerte en brazos y percibir ese calorcito y olor que sólo quienes tuvimos oportunidad de sentirlo antes sabemos que cura el alma. Tengo ganas de observarte y guardar ese instante como un recuerdo que, seguramente, dentro de algún tiempo te contaré como fue. Estoy también segura de que no soy la única porque hay muchas personas que quieren formar parte de tu vida y están también deseosas de conocerte, y es que, todos nosotros conocemos a tu papi y mami y celebramos sus alegrías, y tú, querida Valeria, a buen seguro eres la más grande que han recibido ya que eres parte indisoluble del amor que se profesan y el pilar de sus vidas.

 

La vida, pequeñina, es una gran experiencia y siempre merece la pena vivirla intensamente, y yo, espero formar parte de la tuya y poder pasar contigo tiempo para disfrutar de la persona en la que te convertirás. Desde ya me proclamo tu tía y como tal te mimaré siempre porque es mi especialidad. Mimarte y consentirte, llenarte de cariño y dejar que tu sonrisa me contagie. 

 

Ya eres miembro de honor del "Team Nabizas" y a buen seguro que disfrutarás de las ocasionales reuniones alrededor de una mesa con un plato de lentejas que, aunque ahora mismo no entenderías, más adelante te sucederá lo que a Águeda, que ahora te pasa el testigo al miembro más joven, serán momentos especiales, desenfadados y llenos de risas entre mujeres con grandes sueños e ilusiones, que aunque a veces no se hacen realidad, los compartimos con la seguridad de que entre nosotras encontraremos el apoyo necesario.

 

No quiero darte consejos, solo quiero hacerte llegar a través de estas palabras que espero, algún día leas, alguna reflexión que pueda servirte en tu desarrollo.

Valería, querida niña, será tu mirada la que traslade a tu interior la vida cotidiana, no siempre te gustará lo que ves pero intenta aprender de ello para que te sirva en tu tránsito y no sientas en ningún momento que eso que no te gusta ver no se puede cambiar ya que posiblemente podrás hacerlo, no sin esfuerzos, y con mucho amor.

 

Respira hondo siempre que puedas y haz tuyo un lugar al aire libre donde puedas sentarte a pensar, a meditar, que te sirva para coger ese oxígeno que necesites y el impulso para seguir.

 

Date siempre el beneficio de la duda, no siempre podrás con todo y no por ello serás peor que nadie, a veces incluso nos proponemos metas que no queremos simplemente nos vemos empujadas por las circunstancias y, cuando percibamos que es así, retirarnos es ganar bienestar.

 

No dejes que te digan qué debes hacer o cómo hacerlo, busca la forma que te haga sentir bien y cuando la halles no dejes que nadie te diga qué no puedes. Sé dueña de tu vida siempre y déjate acompañar por buenas personas, las reconocerás porque son las que se alegran de tus éxitos y te acompañan en tus derrotas.

 

Disfruta del amor intensamente, es una de las mejores experiencias que se pueden vivir. Lo reconocerás enseguida porque esa persona sin necesitarte querrá estar contigo sin condiciones, amando todo de ti con absoluta libertad y acompañándote en tu crecimiento personal. 

 

Rodéate de buenos amigos, personas a las que puedas confiar tu vida y aléjate de quienes únicamente buscan algún beneficio.

No tengas miedo a caerte, y cuando eso suceda, recuerda que tienes a tus padres y a todos los que te consideramos una parte nuestra para ayudarte a levantarte. No sientas que recurrir a quienes te quieren como una debilidad, sino la fortuna de tener a quien confiarle esos momentos y que seremos tu apoyo sin pedir nada más que tu felicidad.

 

Y ahora, Valeria, te dejo dormidita y acochada por tu mamá y papá. Sé que esos primeros días a tu lado en la mayor intimidad valen oro para ellos que necesitan tiempo para estar contigo y ver su sueño hecho realidad, y tú necesitas paz y silencio para que descanses y te acostumbres a este nuevo lugar que procuraremos sea siempre un espacio seguro para ti.

 

Bienvenida, pequeña Valeria.