Pronto se celebrarán los dos años de las últimas elecciones municipales en las que fui elegido Alcalde de Cotobade, con cándida edad.
Cotobade tiene exactamente 4.427 habitantes. Es un ayuntamiento, por lo tanto, que está al borde de los 5.000 ciudadanos censados. Limita con la Capital de la Provincia, Pontevedra, y es un lugar de tránsito entre ésta y la provincia de Ourense a través de la N-541.
Me siento sincero si manifiesto mi aprecio personal por el anterior alcalde y el considerarlo como una persona responsable, exculpándolo de algunos males para con Cotobade provocados por sus compañeros de partido en ámbitos superiores, y algunas triquiñuelas entre sus socios de gobierno en Cotobade, que provocó cierta parálisis en la toma de algunas decisiones trascendentales para el futuro del Concello.
Cuando llegamos al Gobierno nos encontramos un ayuntamiento con un Plan de Saneamiento Económico-Financiero para el período 2010-2012 aprobado en junio de 2010, también con 4 dedicaciones exclusivas en los ÿrganos de Gobierno, que les costaban a las arcas municipales 125.000 euros al año, y déficit en las cuentas municipales desde el año 2009.
Teníamos muy claro que había que tomar medidas claras, pero siempre respetando varias premisas.
Asumimos las riendas de Cotobade un equipo personas muy joven, con una media de edad de 38 años, todos sin pasado político en la política local, con ilusión, fuerzas y ganas de impulsar nuestro ayuntamiento en lo económico, laboral y en infraestructuras que nos doten de empuje para competir y poder asentar población en nuestro pueblo.
Cotobade obtuvo la participación electoral más alta de Galicia, un 82%. Desde el compromiso de cumplir nuestra palabra y llevarla a la práctica con hechos. Y desde el sentido común en la toma de deciciones honestas, con una planificación de los pasos a seguir dos años después podemos hablar de que nuestra prioridad fue encaminar la gestión municipal al saneamiento de las cuentas, reducir el gasto corriente, eliminar gastos superfluos e impulsar inversiones que nos hagan crecer para colocarnos en el mapa. Creo que ese es el camino.
La primera medida para todo ello, muy conocida en aquel momento, fue poner coto al gasto en los ÿrganos de Gobierno. Para ello, de las 4 dedicaciones exclusivas del bipartito, eliminamos 3, aprobando solamente 1 para la Alcaldía, y rebajando esta un 20% con respecto al anterior alcalde. Sólo hablar de esta medida, le ha supuesto un ahorro anual al ayuntamiento de 81.000 euros, que multiplicados por 4 años que dura un mandato, supone un ahorro de 324.000 euros.
Esto lo venimos cumpliendo desde que entramos, luchando contra pactos de gobierno cuyo único punto de negociación sea el de aprobar a la ligera sueldos para los concejales de los partidos pactantes sin criterio de productividad alguno.
La segunda estrategia ha sido una constante desde que lideramos el Pleno de la Corporación de Cotobade, reducir el gasto corriente en el mayor número posible de partidas y conseguir firmar convenios y subvenciones de otras administraciones que nos ahorren tener que dedicar fondos propios a la dotación de servicios e inversiones.
La tercera receta que aplicamos, guía de todas las medidas que llevamos a cabo en los comentarios anteriores, es cumplir los principios de estabilidad presupuestaria exigidos por el Hacienda y reducir a cero el déficit del municipio.
Después de reducir los gastos en ÿrganos de Gobierno un 65%; después de reducir el gasto corriente para promulgar el ahorro y trabajar en la financiación de nuestras inversiones a través de otras administraciones. Podemos decir con orgullo, que Cotobade cerró el año 2012 sin déficit por primera vez desde el año 2009.
Como Alcalde, di cuenta en la sesión plenaria de febrero de la liquidación del ejercicio que terminaba, 2012, en la que se constataba la mejora palpable en la salud de las arcas municipales, con un superávit de 116.910 euros, datos reconocidos por los servicios de Intervención del ayuntamiento. El informe de Intervención deja patente que las cuentas están saneadas y que la tendencia a los números en rojos de los años 2009-10-11 está rota. Podemos presumir de que no hay operaciones de crédito, ni pagos pendientes y que el pago a proveedores se está realizando en un plazo medio de 17 días.
Y venimos de votar en Pleno la aprobación inicial para modificar nuestras normas subsidiarias, que es el Planeamiento Urbanístico actual vigente, a falta de Plan General por aprobar, para dotar a Cotobade de suelo industrial, con un proyecto de Polígono Industrial de 163.000 metros cuadrados para asentar pequeñas y medianas empresas que puedan ofrecer empleo a nuestros vecinos.
En 2 años, hemos dado los pasos necesarios para:
1º, sanear las cuentas municipales totalmente. Hacerlo desde la confianza plena en conseguirlo sin despedir a trabajadores, subir los impuestos y renunciar a servicios.
2º, poner en marcha proyectos que nos coloquen en el mapa y nos hagan ser competitivos.
Y 3º , estar fuera de la lista de ayuntamientos en los que podría intervenir directamente el Estado si no cumplimos los criterios económicos exigidos.
Quedan dos años en los que intentaremos seguir trabajando con empeño, esfuerzo por hacer las cosas de una forma diferente y manteniendo un permanente contacto con todos los vecinos para que se practique desde el convencimiento que no hay más administración que comprenda los problemas de la gente que la municipal y, por cierto, es la más genuina y pretérita.
20.03.2013