Cuando no hay voluntad política

30 de diciembre 2023

El titular de este artículo resume muy bien la conclusión a la que uno llegó desde hace mucho tiempo, ni los aplausos de la primera ola de la COVID ni la Navidad entre otras muchas cosas hacen cambiar las posiciones de los políticos hacia los celadores y que están en un limbo profesional desde sus orígenes, digamos y, para ser un poquito generosos, desde el 5 de junio de 1971, fecha de la Orden Ministerial y franquista que recoge las 23 funciones de este colectivo y que hoy en día están más que sobrepasadas en el ejercicio de sus funciones.

En la última de las cuatro reuniones del año 2022 con la 5 Comision de Sanidad del Parlamento de Galicia, la presidenta de la citada comisión, la señora Corina Porro nos remitió a la Dirección General de FP en la comunidad autónoma después de un año de reuniones, con lo cual balones fuera y que uno que es perro viejo en esto sabía que iban a quedar en saco roto.

Se mandó en dos ocasiones a la citada dirección el mismo correo electrónico, por si se habían olvidado, pues estamos esperando respuesta hasta hoy, o sea más balones fuera. Es más, se nos dijo que la directora estaba recién llegada al cargo y seguimos con los balones, por cierto fue la presidenta de la citada comisión la que nos remitió a la dirección de FP en Galicia.

¿Se imaginan si los celadores se ponen de huelga en plenas elecciones autonómicas? Pues yo no me lo quiero imaginar. Estamos en quirófano, consultas, información, urgencias, planta, UCI, laboratorios, atención primaria, endoscopias, etc. etc. pero el cortador de jamón que sí es una FP no se mueve del sitio.

Cuando los políticos ingresen en un hospital, ya que algún día lo harán, los atenderemos como uno más y le recordaremos de paso todas nuestras reclamaciones empezando por la categoría sanitaria, formación y titulación. Aunque visto lo visto está claro que les gusta más el jamón, por otro lado nada nuevo.

Es muy sencillito, miren, se lo explico a los políticos que no tienen el título de FP: sometan a debate y aprobación en la comisión correspondiente la Proposición no de Ley como hicieron en Cantabria y Baleares, fíjense qué fácil, simplemente sería un apoyo a nivel institucional, pero ni eso.

Se le llama voluntad política y, por favor, no nos aplaudan más.

Somos categoría sanitaria en Navarra por un Decreto Foral del año 2016 y el Instituto Nacional de Cualificaciones Profesionales (INCUAL) tiene que aplicar el Decreto Ley de profesiones del año 2011.

Puede que sea muy reiterativo, que lo soy, pero a día de hoy la mayoría de las reclamaciones del colectivo están sin resolver, por no hablar de problemas más domésticos del área sanitaria de Pontevedra/Salnes y que afectan al mencionado colectivo como, por ejemplo, el deterioro total de las sillas de urgencias de Montecelo como habrán podido comprobar la mayoría de los pacientes, así como dignificar la contratación respetando de esta manera el Estatuto Marco. Fin de la cita.