El agua residual que se trata en la depuradora (EDAR) de Os Praceres ya se emite por el nuevo emisario y se conduce a lo largo de la ría hasta su expulsión.
Las obras de este proyecto presupuestado en 12 millones de euros se iniciaban en junio de 2021 y durante los últimos dos meses ha estado en fase de pruebas hasta su entrada definitiva en funcionamiento.
Teresa Gutiérrez, directora de Augas de Galicia, junto al delegado territorial de la Xunta, Agustín Reguera; la directora del Intecmar, Covadonga Salgado; y Mari Carmen Vázquez, presidenta de la cofradía de Lourizán, comprobaron este viernes en la EDAD el proyecto desarrollado.
Gutiérrez manifestó que el agua depurada es enviada por el nuevo emisario a un puneo en que la disolución en caso de que se produzca algún problema en la EDAR evitaría que afectase a las playas, zonas de baño o bancos marisqueros.
Esta obra, recordó la directora de Augas de Galicia, se suma a la acometida en la propia estación depuradora en la que se renovó el tratamiento biológico y el tratamiento de fangos para que se cumpliera con la directiva de la Unión Europea, que amenazaba con una sanción económica. Sanción que ya ha sido levantada, explicó Teresa Gutiérrez.
La responsable del organismo público señaló que la tecnología de perforación dirigida empleada por la empresa adjudicataria de la obra permitió que el emisario saliera directamente al lecho marino "sin necesidad de dragado para ese rescate" ofreciendo el "mejor punto de vertido".
Además, el nuevo emisario funciona por gravedad de manera habitual aunque cuente también con equipos de bombeo. Esta condición permite una mejora en la "eficiencia energética".
La estación depurador trata 900 litros/segundo. En todo caso, Teresa Gutiérrez explicó que la Xunta de Galicia sigue trabajando en la red de saneamiento con la intervención en el tanque de tormenta en Marín y actualmente con las obras en el colector del río Lameira; además de los dos proyectos de tanque de tormenta en Poio.
Sin embargo, reconoció que el más difícil de acometer es el bombeo de Cocheras "por donde probablemente entra más contaminación en la ría". Para abordar este proyecto es necesario utilizar terrenos de dominio público hidráulico y por tanto es precisa la autorización de Costas.
Avanzó que el proyecto se encuentra en fase de redacción y afirmó que "necesitamos un acuerdo" con Costas para abordar este punto contaminante. También tienen previsto sacar a licitación el proyecto y obra para la ampliación de la depuradora de Os Praceres.
El emisario que se venía utilizando hasta ahora continuará perteneciendo a la Xunta de Galicia y, según Teresa Gutiérrez, "sigue trabajando a determinada cota". Apuntó que con mareas vivas se convertirá en un emisario complementario del nuevo y en casos de emergencias servirá como alternativa cuando sea necesario realizar tareas de mantenimiento del nuevo. Indicó que es una infraestructura "valiosa y queremos conservarla y mantenerla".
Además, el otro emisario permitirá mantener separados los dos vertidos. El nuevo se ocupará de los residuales, mientras que el antiguo se encargará de los vertidos industriales. "Ence lo utiza normalmente. El vertido industrial sale por ahí siempre", aseguró la responsable autonómica.
La inversión total en la depuradora y en la emisario asciende a casi treinta millones de euros. Según la Xunta de Galicia, los límites de vertido se sitúan ahora entre un 60% y un 80% por debajo del establecido por la legislación europea y elimina el 90% de los contaminantes.
Desde la cofradía de Lourizán, Mari Carmen Vázquez reconocía la importancia de esta intervención para el banco marisquero, que actualmente tiene categoría B, y advertía también de la necesidad de una actuación en el bombeo de Cocheras.