Quinientas personas participaron este domingo en la II Xuntanza de Maiores organizada por el Concello de Poio.
Esta jornada de convivencia, según explicó el alcalde, Ángel Moldes, "supone una oportunidad y un espacio para fortalecer las relaciones con las personas que nos rodean y para disfrutar. La actividad no sólo se refiere a mover el cuerpo, sino también a mantener activa la mente, a compartir momentos de felicidad y a seguir creciendo, todo esto es vida y repercute de manera directa en como nos sentimos".
Así, señaló que "un concello de todos y para todos, como el nuestro, es el que se compromete a crear un entorno inclusivo, donde cada persona, independientemente de su edad, tenga acceso a actividades que fomenten una vida activa y saludable".
Por eso, recordó que este encuentro nació hace un año a petición de las propias personas mayores del municipio, que demandaban un evento propio en su concello.
"Escuchar lo que nos pide el vecindario es un deber y siempre es un acierto. En Poio queremos a nuestros mayores", añadió.

A las 13.00 horas comenzaron a llegar los asistentes a un almuerzo que arrancó una hora más tarde y que ofreció de menú empanada, callos, carne al caldero, bebidas y postre.
Todo amenizado con la actuación en directo del Dúo Prisma, que dio paso al baile y sorteos de regalos donados por comercios locales.
La mayor parte de los 500 asistentes fueron vecinos de Poio, pero también se acercaron hasta la carpa instalada en A Seca personas procedentes de municipios del entorno.
Cada asistente pagó 25 euros por participar.
"Eventos como este demuestra que, apoyando a nuestros mayores, estamos invirtiendo en el bienestar de todos, sin importar la edad. Hoy convertimos A Seca en un lugar de encuentro, de participación y de cuidado mutuo", concluyó.