Un proyecto de formación inclusivo y con perspectivas de inserción laboral pionero en Galicia y en un entorno único como es el Lago Castiñeiras. Así es la FP Dual impulsada por la Fundación Juan XXIII en los antiguos terrenos del Centro de Recuperación de Aves, un ejemplo de inclusión social y laboral centrado en la jardinería del que actualmente se benefician 10 alumnos.
La alcaldesa, María Ramallo, y los concejales Marián Sanmartín y Manuel Santos, visitaron este viernes las instalaciones, acompañados por Diego Chapela, director de la Fundación Juan XXIII y del presidente de la Comunidad de Montes de San Xulián, Manuel Estévez, propietarios de los terrenos que aceptaron "encantados" su cesión "para un proyecto que consideramos fundamental", aseguró Estévez.
Esta formación tiene carácter dual porque se combinan las aulas teóricas con el trabajo práctico de campo, siguiendo un modelo docente "que en nuestro país solo existe en Mallorca", afirmó Chapela, que fue de donde sacaron la idea, "dado que allí ya llevan 4 años mostrando el éxito del mismo".
La necesidad de crear una modalidad formativa adaptada como esta tiene que ver "con la forma de aprendizaje que tienen las personas con discapacidad, que se basa en la repetición y en el aprender haciendo". Por eso, para los usuarios de la Fundación para sacar adelante un curso "no es bastante con 250 horas". De ahí que te eres FP tenga una duración de tres años.
La alcaldesa, María Ramallo, quiso remarcar el esfuerzo y la ilusión que la Fundación Juan XXIII lleva invertido en este proyecto, "que supone una auténtica oportunidad para estos alumnos, que actualmente precisan profesionalizar su labor, que muchos ya hacen impecablemente". Además, la regidora considera que es "muy importante aprovechar espacios como este del Lago Castiñeiras para impulsar proyectos de inserción social".
Cuando los diez alumnos de esta primera promoción finalicen el FP Dual conseguirán su certificado de profesionalidad con el que podrán acreditar sus conocimientos en el mundo de la jardinería, pero no solo eso.
"Nosotros queremos buenos jardineros, pero sobre todo buenas personas que sepan de jardinería y eso hay que trabajarlo", asegura Chapela, que explica que se incluyen tutorías de habilidad sociales, "con las que garantizamos que cuándo vayan a trabajar para una empresa podian mantener su puesto de trabajo".