El Ayuntamiento de Vilaboa iniciará la recuperación del petroglifo del Chan de Areeiros, incluido en el sendero de los Petroglifos de Cobres, y el interior del Forno de Cal, elemento único del patrimonio etnográfico de las Rías Baixas.
Se trata de dos elementos singulares en el municipio que se encuentran actualmente en mal estado y necesitan una rehabilitación para recuperar la visibilidad y evitar el derrumbe.
No caso del petroglifo del Chan de Areeiros, la vegetación y a las diferentes capas biogénicas impiden totalmente su visibilidad, perdiendo un elemento fundamental del sendero en el que precisamente es un reclamo.
Este petroglifo, segundo consta en el PGOM, se caracteriza por ser "una losa ubicada en un contorno forestal a base de eucaliptos y pinos en el que se aprecian labores de cantería. En ella se inculturaron tres cérvidos (uno de ellos astado y con una lanza clavada en el lomo), un antropoformo y un motivo geométrico la base de clrculos concéntricos que aparece muy dañado (desplacamiento) por causa del fuego".
Este trabajo de recuperación tendrá varias fases, comenzando por la delimitación del entorno y el desbroce manual, con control arqueológico, de la vegetación inmediata a los paneles. Después procederán a la limpieza manual de la suciedade más dañina que cubre los paneles de los grabados, actuarán sobre la piedra y levantarán un 3D del petroglifo que facilite la comprensión de este elemento arquitectónico e instalarán nuevos paneles informativos.
En cuanto al Forno de Cal, la rehabilitación que se realizó este año dejó a cielo abierto el sistema de combustión que se encuentra en mal estado y que es necesario rehabilitar y restaurar para evitar su derrumbe. En esta actuación está contemplado el rejunte de las paredes internas y la colocación de una puerta de acceso al mismo que garantice bajo situaciones controladas y por motivos de limpieza, el acceso al interior del mismo.
Esta serie de trabajos permitirán la musealización del Forno a través de la consolidación de los muros de adobe de la parrilla del horno; el enfoscado de los muros interiores del horno que quedaron sin sellar; la realización de un relleno concertado teñido, emulando un estrato de superficie quemada, incorporando incluso carbones o maderas y piedras calizas, para la mejor comprensión de este espacio y la remodelación de las rejas de cierre que tiene en la actualidad.
César Poza, alcalde de Vilaboa, indicó que estas dos actuaciones continúan la línea de trabajo iniciada en el anterior mandato de basar la promoción turística del municipio en la promoción de sus elementos patrimoniales tanto naturales cómo arqueológicos.
La actuación está financiada por la Agencia de Turismo de Galicia con un presupuesto de 28.713 euros.