Vilaboa ya disfruta de su mercadillo de Navidad, que desde este fin de semana y hasta el 7 de enero estará instalado en la carretera vieja de Paredes para convertirse en un escaparate del potencial creativo de la artesanía vilaboense.
Impulsado por la Concejalía de Promoción Económica, el mercadillo busca aportar alternativas sostenibles en el medio rural y concienciar sobre un necesario cambio de hábitos en los consumos.
Apuesta así por la joyería artesanal, esmaltes, manualidades, alimentación ecológica, prendas de segunda mano, jabones artesanales, adornos y complementos con impresión instantánea, además de la repostería casera y las bebidas calientes.
En los stands también está el alumnado del CPI O Toural, buscando financiar la excursión de fin de curso del alumnado de cuarto de la ESO con artículos elaborados por ellos, y el colegio Riomaior.
Detrás de cada producto, indican desde el Concello, hay una historia de creación y de inspiración, la que le imprime cada artesano participante: Laura Filgueira, Pilar Blanco, Montserrat Rosendo, Carmen Castro y Carlos Acuña, que este año apuesta por la alimentación ecológica con su tienda Alcrique Eco.
Pilar Blanco, de Obraidoiro Hedra, ofrece en esta tercera edición del Mercadillo exclusividad con sus piezas de joyería, esmaltadas artesanalmente con técnicas tradicionales para quienes busquen diferenciarse. La reina del stand es de nuevo la camelia, la flor que inspira a Blanco para realizar sus piezas.
La que también repite este año es Laura Filgueira, que apuesta por la venta de artesanía con Erre3, una tienda con la que le de la una segunda vida a la madera usada convirtiéndola en un adorno de Navida, en una tabla de cocina o mismo un llavero.
Las que también buscan una segunda vida para los productos son Montserrat Rosendo y Carmen Castro con Cachito. Estas dos mujeres venden artilugios usados de todo tipo, piezas de arte en madera, antigüedades, prendas vintage y "vellerías", buscando una segunda vida en hogares que aprecien la belleza de la calidad.
Por su parte, el alumnado del colegio del Toural de 4º de la ESO oferta gofres, bizcocho, empanadillas, chouripán y alguna que otra sorpresa con la que quieren recaudar dinero para su viaje a París. Frente a ellos está la el alumnado del colegio de Riomaior, que comercializan artículos variados de regalo elaborados por ellos mismos para financiar la excursión de fin de curso, en su caso a Dublín.
El sexto stand del mercadillo el Concello lo cedió a la asociación Carretera Vella, en la que se ofrece chocolate caliente recién hecho por integrantes de este colectivo vecinal para sufragar los gastos derivados por el ambientación navideña en este entorno de Paredes.
El mercadillo estará abierto todas las tardes hasta el 7 de enero y en horario de mañana y tarde los fines de semana y los festivos.