El barrio de Campolongo, que comenzó su urbanización a finales de los años sesenta del siglo XX en la zona sur de Pontevedra, es en la actualidad uno de los principales núcleos residenciales a un paso del centro de la ciudad.
Desde hace años, los residentes, agrupados en la asociación de vecinos San Xosé de Campolongo, reclaman a la administración local una atención urgente a varias problemáticas que afectan a su calidad de vida.
El presidente de la asociación de vecinos San Xosé de Campolongo, Juan Manuel Loureiro, y miembros de la junta directiva quisieron dar visibilidad a sus quejas ya históricas, pues la mayoría llevan, sin respuesta efectiva, cerca de dos décadas.
Acompañan a Loureiro por este recorrido por el barrio de Campolongo: José Luis Cid, Manolo Vilela, Lorenzo Tilve y Ángel Andón.
El deterioro más notorio que se encuentra el visitante es el vallado del Paseo de Valle-Inclán, que discurre sobre el río Gafos soterrado y que demanda una reparación urgente.
Esta reja fue colocada para impedir el tránsito por el centro del paseo por causa de la inestabilidad de la estructura y el riesgo de derrumbe por sobrecarga.
Se extiende desde el trecho del paseo que entronca la calle Xeneral Rubín con la Praza da Constitución. Otro pequeño cierre metálico se encuentra en el trayecto del paseo entre la calle Iglesias Vilarelle y Alcalde Hevia.
Loureiro insiste en que la verja de este cierre presenta un estado de abandono alarmante, acumulando suciedad y convirtiéndose en un peligro para los niños que juegan en la zona y que ya detectaron que se introducen en la zona prohibida, debido a los cierres están rotos.
En lo que respecta al estado del río Gafos, la asociación demanda la rápida ejecución del proyecto de naturalización, que recuerdan que lleva 25 años en el programa del Gobierno municipal. "Si realmente hay superávit en el Concello de Pontevedra, no hay disculpa para no actuar. Queremos que se diga claramente si el proyecto se llevará a cabo o no", señala Loureiro.
Para este colectivo, el tiempo apremia, ya que "estamos a mediados de noviembre y se acaba el plazo para el dinero de las obras que iban a justificar el levantamiento del río Gafos", lamenta.
El paseo junto al cauce del río Gafos también es objeto de protesta. El motivo es que el acceso por la calle Alcalde Hevia está prohibido desde el 10 de octubre, fecha de la borrasca Kirk, y, pasado el incidente meteorológico, no se retiró la valla que impide el paso.
"Parece ser que están cambiando las pasarelas de madera, pero podrían dejar acceder hasta donde no hay obras. Es una muestra más de la dejadez en este tema", comenta uno de los vecinos.
Otro punto de preocupación es una parcela ubicada al lado de esta entrada al paseo, en la esquina de las calles Alcalde Hevia y María Victoria Moreno, que lleva años en estado de abandono. "Después de 17 años de reclamaciones, seguimos sin acciones por parte del Concello. La falta de limpieza y mantenimiento provoca un ambiente insalubre, con ratas y maleza que dificultan la calidad de vida de los vecinos", explica.
Este terreno es privado, por lo que estos vecinos insisten en que el Concello de Pontevedra debería tomar cartas en el asunto y obligar a sus propietarios a mantenerlo en condiciones. En ese predio de 200 metros cuadrados hay instaladas unas vallas publicitarias, por las que el propietario cobra un alquiler.
"Lo que no puede ser es que no sancionen a la persona que no limpia mientras está teniendo un beneficio económico con las vallas publicitarias", indica Loureiro. Lindando con esta parcela, el Concello posee un terreno de 80 metros cuadrados (en la proximidad del que fue el local Siroco) por lo que la asociación de vecinos propone que el consistorio haga una oferta económica al propietario para la adquisición de su parcela.
Asimismo, la asociación de vecinos de Campolongo reivindica una solución para una parcela de cien metros cuadrados, conocida como el "galpón" (hace tiempo funcionaba en esta pequeña nave una carpintería), ubicada frente a la anteriormente mencionada, en la confluencia entre la Avenida María Victoria Moreno y el Camino de las Abilleiras.
Esta parcela se encuentra en estado de abandono y es un foco de suciedad y plagas, a pesar de las fumigaciones de operarios municipales.
Tras años de litigios sobre la propiedad, la asociación pide al Concello que llegue a un acuerdo con el propietario o que, si esto no es posible, proceda a la expropiación por interés general.
La propuesta incluye la limpieza de la parcela, la demolición de la estructura en ruinas y la posible ampliación de la calle, mejorando así la calidad de vida del vecindario, un proceso que llevan reclamando durante los últimos veinte años.
También realizan una llamada de atención sobre el hórreo de la Praza da Constitución, que sufrió un incendio en marzo de este año y que permanece deteriorado sin que se tomasen medidas para su restauración. "El hórreo representa la falta de atención al patrimonio local y a la seguridad de los vecinos", añade.
El quiosco de la Praza da Liberdade, que durante años estuvo destinado a cafetería, es otro ejemplo del abandono que sufre el barrio. "El Concello presentó un proyecto para reactivar este espacio, pero seguimos a la espera de que se concrete una acción real", recalca el presidente de la asociación de vecinos que iba a ser una de las ocupantes de este local, junto con la Federación de Vecinos Castelao. Una promesa que, pasadas las elecciones municipales de 2023, "quedó en saco roto".
La limpieza general del barrio es motivo de quejas continuas, una situación que, inciden, no sólo afecta a Campolongo, sino que extienden al resto de la ciudad. "Existen problemas de mantenimiento y falta de limpieza en los parques, bancos y espacios públicos, que no se encuentran en condiciones de uso", apunta Loureiro.
Sobre la iluminación, los vecinos reconocen avances recientes, mas reclaman que se amplíe la cobertura luminosa en áreas como la Avenida Augusto García Sánchez, donde la escasez de luz hace que los paseos nocturnos sean arriesgados, y la Praza de Galicia.
Otra cuestión que se menciona es la necesidad de revisar el estado de los árboles en esta Avenida Augusto García Sánchez, con muchos ejemplares dañados y con riesgo de caída, como se puede comprobar tanto en los troncos debilitados como en el pavimento reventado por las raíces.
También manifiestan estos vecinos su preocupación por un posible foco de trapicheo en el aparcamento por la trasera de los edificios de Alcalde Hevia lindando con el Paseo de Valle-Inclán, que aumenta la sensación de inseguridad en el barrio. "Pedimos un incremento de la vigilancia policial para erradicar ese problema y garantizar la seguridad de los vecinos", subraya Loureiro.
Los vecinos piden un compromiso más firme por parte del Concello para movilizar proyectos que vinculen el acceso al río y la integración de espacios, como la unión con una plataforma de preferencia peatonal entre los parques de la Praza da Constitución y el conocido popularmente como "parque de la seta". "Es un momento clave para que el Concello demuestre que realmente le interesa esta parte de la ciudad y que va a actuar en consecuencia", reflexiona el presidente de la asociación.
Mientras espera que los responsables municipales materialicen los proyectos comprometidos, la asociación de vecinos San Xosé de Campolongo mantiene en su agenda dos iniciativas.
La primera consiste en solicitar a la Xunta de Galicia la cesión del jardín trasero del edificio de Sanidade de la Avenida de Vigo, con el fin de integrarlo en el entorno del río Gafos y permitir que la ciudadanía pueda disfrutar de este hermoso espacio. Si la cesión no es posible, la asociación pretende que se mantenga abierto al público.
El segundo proyecto busca que los vecinos puedan acceder al "complejo deportivo de los militares" (Centro Deportivo Sociocultural Militar Campolongo), situado tras el edificio administrativo de la Xunta, para que todos los ciudadanos de Pontevedra puedan utilizar las instalaciones, consistentes en pistas de tenis, pádel, piscina, gimnnasio y zona verde, mediante el pago de una pequeña entrada. La asociación quiere retomar las gestiones con el Ministerio de Defensa para que esta iniciativa se pueda llevar a cabo.
