El grupo Vamos a todo, uno de los clásicos del Entroido pontevedrés, será el encargado de dar el pregón de los carnavales de Pontevedra. Sus miembros, en la actualidad una treintena, se subirán al balcón de la Casa da Luz para dar el pistoletazo de salida a nueve días llenos de diversión, retranca y buen humor. Será el viernes 5 de febrero, a partir de las nueve de la noche, y por ahora, reconocen sus miembros, "non sabemos o que vamos a facer".
Aunque suene a tópico, Javier Pazos asegura que es "verídico". Este miembro del grupo, que actuó como portavoz, reconoció que el listón está "alto" tras los pregones de Caqui Viñas, Os Amoriños de Bora y Os de Sempre en años anteriores, "pero algo faremos". Y siempre, adelantó, con el espíritu mordaz y reivindicativo que caracteriza a esta formación, que este año cumple diez años de vida.
Son, recordó la concejala de Fiestas Carme da Silva, uno de los grupos más activos del carnaval de Pontevedra porque "participan absolutamente en todo o que se fai na cidade", haciendo siempre gala de "moito sentido do humor, retranca e buscando asuntos de actualidade". Por ello, aseguró que "é unha honra" que aceptaran dar el pregón este año.
Vamos a todo es uno de los grupos más críticos y mordaces de los que participan en el carnaval pontevedrés. Entre otras parodias, muchos recuerdan aún su peculiar musical Bye Bye Teresa -en relación a la salida de Teresa Casal del PSOE-, su carroza con la fachada del Concello, los pi-rratas del Puro Lérez, el servicio de limpieza municipal, los soldaditos verdes, la visita del Papa o la divertida Lomboaventura con el Ravachol-Khan.
Javier Pazos, que apareció en la rueda de prensa con un bebé en brazos -como guiño al gesto de Carolina Bescansa en el Congreso-, afirmó que para ellos es un "orgullo" ser los pregoneros del carnaval pontevedrés porque "levamos moitos anos na rúa", disfrutando de una fiesta a la que calificaron como el mejor carnaval urbano de Galicia "e que está a ser unha referencia en toda a comunidade".
Vamos a todo, recordó, participa en todas las actividades del carnaval salvo en el concurso de murgas, que abandonaron porque entendían que su propuesta "non tiña lugar" en el formato actual. "Agora van músicos e cunhas voces incribles, dá gusto velos", afirmó el portavoz del grupo. Pero se mantienen fieles a todo lo demás, el desfile, la Noche Pirata, la Mostra da Parodia o el entierro del Ravachol, del que forman parte del cortejo fúnebre.
Y todo ello supone un gran coste económico. Solo el local en donde se reúnen y guardan todo su material les cuesta 4.000 euros al año. A pesar de ello, prometen seguir "por moitos anos" e incluso aprovecharon para pedir al Concello que ponga en marcha de forma decidida un Entroido de Verán, para el que ofrecieron toda su colaboración. Carme da Silva prometió estudiar la propuesta y buscar las fechas más adecuadas para poder organizarlo.