Una modificación del PXOM de Sanxenxo permitirá construir 1.625 nuevas viviendas y un campo de golf

Sanxenxo
19 de julio 2022

Un convenio "histórico" para Sanxenxo. Así han definido Telmo Martín y Marta de Santos, coordinadora de gestión urbanística de la compañía Serviland, el acuerdo alcanzado para desarrollar tres suelos urbanizables que, en su mayor parte, son propiedad de la Sareb

Telmo Martín y Marta de Santos, coordinadora de gestión urbanística de la compañía Serviland Concello de Sanxenxo

Un convenio "histórico" para Sanxenxo. Así han definido Telmo Martín y Marta de Santos, coordinadora de gestión urbanística de la compañía Serviland, el acuerdo alcanzado para desarrollar tres suelos urbanizables que, en su mayor parte, son propiedad de la Sareb.

En concreto, se trata del SU-11 en el Alto de Miraflores, del SU-14 en Monte Faro (Noalla) y el SU-27 en Altamira-Vilalonga, que en su conjunto suman 1,7 millones de metros cuadrados. De ellos, un 78% (1,3 millones) se destinarán a espacios libres públicos.

Entre estos tres suelos urbanizables habrá capacidad para 1.625 nuevas viviendas.

Para poder desarrollar estas tres áreas, el gobierno municipal deberá aprobar una modificación puntual de su PXOM, para lo cual el convenio fija un periodo máximo de dos años, que empezarán a contar desde el inicio del procedimiento de evaluación ambiental.

La mayor operación urbanística será la de Monte Faro. Con una extensión de casi 1,5 millones de metros cuadrados, el suelo quedará habilitado para la construcción de 1.290 viviendas. Son 57 menos de las previstas en el proyecto inicial.

Los espacios libres públicos se incrementarán hasta los 1,2 millones de metros cuadrados, dentro de los que se incluirán un campo de golf que la promotora tiene que entregar ya ejecutado al Concello. Con él, Sanxenxo busca mejorar su oferta turística y crecer como destino vacacional.

En el Alto de Miraflores se contempla un ámbito de actuación de 139.230 metros cuadrados, de los cuales el 70% (96.582 metros cuadrados) están calificados como suelo rústico de protección forestal, por lo que se convertirán en una zona verde de uso público.

Debido al interés paisajístico de la zona, la modificación del PXOM reducirá significativamente la edificabilidad. De las 414 viviendas previstas se pasará a diez residencias unifamiliares. 

El tercero de los suelos, situado en Altamira-Vilalonga, tiene una extensión de 85.651 metros cuadrados y en él se proyecta la construcción de otras 325 viviendas, entre ellas algunas con precios asequibles y reservadas para jóvenes.

Los espacios libres de esta unidad ocuparán 35.340 metros y el Concello reservará espacio para poder construir nuevos equipamientos destinados a la tercera edad.

Desde el Concello agradecen la "disposición y colaboración" de la Sareb para alcanzar este acuerdo que, según ha reiterado Telmo Martín, es "muy beneficioso" porque los vecinos ganarán espacios públicos, nuevos equipamientos, viviendas asequibles y un desarrollo más integrado en el paisaje.