Una cámara de frío y un libro para celebrar el éxito del Plan Social

Pontevedra
11 de julio 2018

Un año después del primer Plan Social, las asociaciones y colectivos que han participado en esta iniciativa hacen balance de cómo han evolucionado unos proyectos que, sin el empuje económico de Ence, difícilmente podrían llevarse adelante.

Junta directiva del Gremio de Mareantes de Pontevedra posando con el libro editado gracias al Plan Social
Junta directiva del Gremio de Mareantes de Pontevedra posando con el libro editado gracias al Plan Social / Mónica Patxot

Un año después del primer Plan Social de Ence, las asociaciones y colectivos que han participado en esta iniciativa hacen balance de cómo han evolucionado unos proyectos que, sin el empuje económico de Ence, difícilmente podrían llevarse adelante.

En esta ocasión, nos ocupamos de dos iniciativas de asociaciones de ámbitos muy diferentes pero que comparten un gran impacto en la sociedad: la Asociación de Acción Solidaria Sor Elvira y el Gremio de Mareantes de Pontevedra.

Julio Santos Pena representa a la Asociación de Acción Solidaria Sor Elvira de un modo casual. Al fallecer Sor Elvira, junto a un grupo de exlumnos de la religiosa, decidió continuar su labor. Hoy la Asociación da cobertura de alimentos "a 52 familias y un número oscilante según el momento del año de entre 50 a cien inmigrantes que se surten de nuestra despensa", según nos comenta Julio Santos.

Para dar respuesta a estas familias, se encontraban con un grave problema para mantener los productos frescos en perfectas condiciones de almacenamiento. Por este motivo, solicitaron al Plan Social de Ence la dotación de una cámara de frío para alimentos perecederos: "hemos mejorado al 90% la capacidad para conservar los alimentos" ya que, sobre todo en los meses de verano "teníamos que dar salida a los alimentos perecederos en apenas uno o dos días".

De este modo, podrán gestionar mejor los alimentos que solicitan los usuarios de este centro, situado en la calle Secundino Lorenzo de Marín, pues, como indica Julio Santos "no damos paquetes cerrados, sino lo que necesitan". En este sentido, además de familias en situación de desempleo o que no llegan a final de mes, Julio Santos comenta un caso especial, el de "un grupo de familias que no sé por qué se les llama vergonzantes, que son personas que no se atreven a pedir porque la vida de repente les ha ido mal y tienen vergüenza y entonces hay que localizarlas, acercarse a ellas y echarles una mano". Una tarea en la que se involucra todo el equipo de voluntarios.

Trabajo voluntario, en otro sentido, es el que realiza la junta  directiva de la Asociación del Gremio de Mareantes de Pontevedra. En su afán por recuperar la historia del que fue uno de los motores económicos de la ciudad de Pontevedra ha editado, con la financiación del Plan Social de Ence, un libro que, en palabras del presidente del Gremio de Mareantes, José Luis Arellano, es "una compilación de documentación de todo lo relativo al Gremio de Marerantes, para que tanto los miembros del Gremio como los ciudadanos de Pontevedra supiesen la historia más a fondo".

Precisamente, José Luis Arellano fue el encargado de realizar esta compilación, extractando la documentación aportada en su mayoría por el Museo de Pontevedra, así como documentos del propio Gremio y textos de Xosé Filgueira Valverde y Casto Sampedro. El título del libro nos da una idea del laborioso trabajo de compilación que hay detrás: 'Ocho siglos de historia y tradición. De Cofradía do Corpo Santo a Gremio de Mareantes'

Se trata de poner en valor la historia pero también el presente de un Gremio que cuenta con 400 miembros "que son más porque los familiares de cada asociado adquieren también el derecho de ser miembro". El único requisito para asociarse es la vinculación con el mar, ya sea de modo profesional o como deporte. Por eso, este libro se ha concebido "por y para el Gremio", de manera que todos los derechos están a nombre del mismo. Un proyecto ilusionante que, "sin la ayuda de Ence, al no tener nosotros capacidad económica, sería imposible", recuerda Arellano.

Archivado en