Un motorista al que le habían retirado el carnet y nunca lo había recuperado protagonizó en abril de 2023 una peligrosa huida de un control policial en el que se pusieron en peligro otros vehículos y peatones y acabó con la motocicleta chocando contra una patrulla de la Policía Local de Pontevedra. Ahora, ha sido condenado a un año de prisión.
Los hechos ocurrieron sobre las 20.38 horas del 1 abril de 2023. El ahora condenado conducía una motocicleta por la avenida de Marín y, al llegar a la confluencia de la glorieta con Manuel del Palacio, agentes de la Policía local de Pontevedra le dieron el alto, pero, en vez de detener la motocicleta, continuó la marcha.
El motorista salió de allí a velocidad y se introdujo por una zona reservada a la parada de autobús hacia la calle Ribera de los Gafos, poniendo en peligro a las personas que estaban allí. Desde allí, giró a la derecha hacia la calle Ponte Nova, donde estuvo a punto de colisionar con los vehículos aparcados y de arrollar a un peatón que tuvo que arrimarse a la fachada de un edificio para no ser alcanzado.
De la calle Ponte Nova se introdujo en la calle Rosalía de Castro, y a continuación, en la glorieta de la confluencia con Manuel del Palacio. Lo hizo sin respetar la señal de ceda el paso, lo que obligó a los vehículos que circulaban por la glorieta a detenerse.
Finalmente, el vehículo policial que perseguía al acusado lo adelantó en la glorieta e interceptó su marcha. La motocicleta golpeó al coche patrulla en la puerta delantera derecha, produciéndose la caída de la motocicleta al suelo.
El Juzgado de lo Penal número 3 de Pontevedra le condenó por un delito de conducción temeraria a un año y un día de prisión y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores durante tres años y un día, pena que conlleva la pérdida de vigencia del permiso. Y también por un delito de conducción sin permiso a seis meses de prisión.
En ambos delitos aplican la circunstancia agravante de reincidencia, multirreincidencia en el caso de la conducción sin permiso. Y es que este hombre carece de la preceptiva licencia para conducir por resolución administrativa de Tráfico desde 2019 y, aunque realizó el curso de reeducación, no se presentó a la prueba de conocimiento preceptiva para la recuperación del permiso. Desde entonces, ha sido condenado cuatro veces por conducción sin permiso y una por conducción temeraria.
Además, en concepto de responsabilidad civil, indemnizará al Concello de Pontevedra con 652,19 euros por los daños causados en el vehículo policial.
El acusado recurrió la condena y la sección segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra revisó la causa, si bien finalmente desestimó el recurso y confirmó la sentencia inicial.