Un equipo de botánicos, coordinados por la Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galicia (Adega), acaba de completar un exhaustivo estudio de la riqueza florística de la isla de Tambo. La conclusión, que hay el doble del número de especies de las que se conocían hasta ahora.
El estudio, que contó con la colaboración del Concello de Poio, que facilitó el desplazamiento a la isla, es obra del biólogo ambiental Martiño-Fiz López Lindoso, el ingeniero forestal Javier Calvo y el investigador botánico Pablo Rodeiro.
Además, participaron científicos de reconocido prestigio como Javier Amigo y María Inmaculada Romero Buján, así como otros especialistas en musgos y líquenes, que realizaron diversos hallazgos durante su recorrido por la isla.
El resultado de este trabajo ambiental eleva el número de especies conocidas en la isla de Tambo hasta las 237, frente a las 114 que estaban identificadas en estudios previos.
Las conclusiones preliminares indican que la isla de Tambo es una zona de alta biodiversidad en lo que se refiere a las plantas vasculares. A pesar de su pequeño tamaño, unos 0,29 kilómetros cuadrados, crecen en ella el 10% de todas las especies de plantas vasculares de Galicia.
Este hecho refleja, según indica Adega, que Tambo es un lugar "especialmente indicado" para ser orientado a la conservación de la naturaleza, ya que reúne una alta biodiversidad en un pequeño territorio "que es el factor más importante que se busca en un espacio protegido".
Otras conclusiones del estudio indican que en las áreas de mayor biodiversidad de la isla hay una menor presencia de eucalipto. "Es en las zonas libres de eucalipto donde encontramos la mayoría de la biodiversidad mientras que donde esta especie es dominante es menor", destacan los autores.
Además, también se recoge en el inventario la presencia de 22 especies de plantas invasoras y su abundancia en las diversas partes de la isla para facilitar su posterior localización.
Adega ya ha entregado al Concello de Poio un listado preliminar de las especies de plantas que crecen en la isla y va a solicitar la presentación de los resultados de este estudio en la comisión de seguimiento de la isla de Tambo.
Estos datos sobre la biodiversidad botánica, sostiene el colectivo ecologista, avalan la propuesta de creación del espacio natural de interés local (ENIL) para la isla de Tambo, y "entran en contradicción" con el plan de usos diseñado para todo este ámbito natural.