El Carnaval se resiste a irse este 2015 y la parroquia pontevedresa de Salcedo es uno de los rincones en los que más se ha prolongado. La Sociedad Cultural y Deportiva de Salcedo ha celebrado este fin de semana sus actos centrales en el entorno del pabellón de Cabanas, donde el lacón y los disfraces fueron, como es habitual, los grandes protagonistas.
La parroquia empezó la fiesta ya el sábado con un concierto a cargo del grupo Fase REM, pero hasta este domingo no se vivió el día grande. Empezó temprano, sobre las 11.30 horas, con una ruta a caballo desde Cotorredondo hasta el pabellón, en donde a las doce de la mañana se celebró un partido de fútbol sala.
El pregón de la fiesta, que corrió a cargo de Rafael Quintía, presidente de la Sociedade Galega de Antropoloxía, inauguró a las 13.15 horas una sesión vermú amenizada por una actuación musical y que sirvió para calentar motores antes de su tercera edición de la laconada popular.
En esta degustación gastronómica, por solo diez euros por persona, se servía lacón con grelos, chorizos de Lalín, patatas de Xinzo, agua o taza de vino, pan y café. Los pontevedreses llenaron la carpa instalada al lado del pabellón hasta que, a partir de las 17.00 horas, se celebró el Desfile de Carnaval, dotado con premios en las categorías de comparsas, grupos y disfraces individuales. A las 19.30 horas llegó el adiós definitivo con el Enterro do Pichinela.