En tres meses y medio, frente a los cinco planteados inicialmente, tendrá que estar ejecutada la humanización del ámbito del mirador de A Peixeira y su conexión con el campo de San Roque.
Así figura en la oferta presentada por la empresa Misturas, obras e proxectos, que ha sido la ganadora del proceso de licitación abierto por el Concello de Sanxenxo. Asumirá estos trabajos por casi 943.000 euros y la garantía de la obra se ampliará hasta los cuatro años.
Esta actuación abarca una superficie total de 3.100 metros. La Deputación de Pontevedra asumirá el 80% del coste total de la obra, a través del programa de infraestructuras y dotaciones singulares (PON2030), mientras que el Concello de Sanxenxo pagará el 20% restante.
Recuperar la fachada marítima del emblemático mirador portonovés de A Peixeira y humanizar la conexión con el campo de San Roque son dos de los objetivos de la actuación. La intención es que la plaza y el frente marítimo reconecten con su origen.
Así, el proyecto contempla una serie de plataformas, enlazadas mediante rampas accesibles y escaleras, que conectarán de forma directa la Plaza de San Roque y la Avenida de Pontevedra.
Tanto las viviendas como la parte alta del núcleo antiguo de Portonovo se verán beneficiadas por una accesibilidad universal e inclusiva.
El protagonismo del espacio será para el peatón, por lo que el tráfico rodado quedará relegado a un segundo plano mediante estrategias de calmado de tráfico, colocando badenes en la entrada y salida de la zona.
En el vial de la Avenida de Pontevedra, el único con acceso rodado, se limita el paso del vehículo a un carril de una sola dirección.
Dentro de los objetivos del proyecto se encuentra la eliminación, en la medida de lo posible, de las barreras arquitectónicas, visuales y ambientales.
De esta manera, se optará por desmantelar parte del gran muro de contención actual con el fin de renaturalizar y descontaminar el frente costero y, en consecuencia, de mejorar paisajísticamente y funcionalmente la conexión del núcleo con el mar.
Para ello, además de demoler el muro y tratar de recuperar el territorio y paisaje previo, se incluirán especies arbóreas autóctonas (pino atlántico) y se reutilizarán los materiales de demolición para distintos elementos del mobiliario.
En cuanto a la iluminación actual se reemplaza por otra con una proyección más baja, más contenida, totalmente integrada en los muros y barandillas.