UGT y CCOO pusieron en marcha conjuntamente este lunes 12 de abril, en la Subdelegación del Gobierno en Pontevedra, un proceso de movilización para reivindicar el incremento del salario mínimo interprofesional (SMI), la reversión de los aspectos más lesivos de la Reforma Laboral y la derogación de la Reforma de las Pensiones.
Los representantes en Galicia de ambos sindicatos expusieron que convocarán concentraciones en las diferentes ciudades cada día 11 de cada mes (este mes cayó en domingo, por eso lo trasladaron a este lunes) hasta que consigan los objetivos que dieron comienzo a este proceso reivindicativo.
Según Ramón Sarmiento, secretario general de CCOO en Galicia, tanto Comisiones Obreras como UGT llevan tiempo traslándole al Gobierno Central la necesidad de revertir los efectos más lesivos de la Reforma Laboral, de dar cuenta del compromiso de subir el SMI para cumplir con la Carta Social Europea, y de modificar también la Reforma Unilateral del sistema público de pensiones llevada a cabo en el 2013 por el Partido Popular.
Sarmiento advirtió de que están decididos a mantener este escenario de movilizaciones todos los meses hasta que se consigan estos objetivos, y que lo harán de manera unitaria junto a UGT. De este modo hace un llamamiento al conjunto de la ciudadanía para que el próximo 1 de mayo, Día Internacional de los Trabajadores, salga a las calles de todo el país para pedir que se constuya una salida a esta recesión provocada por la pandemia.
Por su parte, José Antonio Gómez, secretario general de UGT de Galicia, recuerda que la pandemia paralizó estas demandas ya que se priorizó la salud de las personas, por lo que llevan esperando mucho tiempo y "ahora sí que toca". Gómez reclama que es el momento de dignificar el empleo, de dignificar el trabajo con derechos y el trabajo decente y cre que los trabajadores esenciales "demostraron durante este período de tiempo que no se puede vivir con menos de 1.000 euros al mes".
El esfuerzo que hizo la clase trabajadora de este país durante la pandemia, según ambos representantes, debe ser reconocido y el Gobierno Central debe responder y cumplir sus compromisos, su programa electoral, y su acuerdo de Gobierno.