El equipo de coordinación para las elecciones autonómicas de Galicia se desplazaba hasta Marín para realizar una demostración de cómo se va a desarrollar el proceso de votación el próximo 12 de julio. Estos comicios están marcados por la pandemia del coronavirus y, aunque ya finalizó estado de excepción, las medidas de protección y seguridad para evitar contagios se mantienen.
Para este "simulacro" se escogió el colegio situado en el CEIP de la Laxe en Marín que, como indica Emilio de la Iglesia, el coordinador de prevención para las elecciones de la Xunta, está ya "adaptado ás medidas preventivas e aos protocolos de cara ás eleccións".
Las medidas comienzan en la propia entrada del colegio, donde el personal de Protección Civil, u otro tipo de representante de la Administración aún por determinar, se encargará de controlar el acceso de personas al interior para que no se rebase el número máximo permitido. Asimismo, también velarán para que aquellos electores de mayor edad o con algún tipo de discapacidad puedan tener un acceso preferente.
Conforme vayan entrando, el personal les informará de las medidas sanitarias que deben observar. Lo primero, desinfectarse las manos con el gel hidroalcohólico que estará dispuesto en la entrada y, de no llevarla puesta, coger una mascarilla de las que estarán a su disposición gratuita junto con el gel.
A continuación, deberán seguir las flechas impresas en el suelo que les marcarán el recorrido hacia la zona de votaciones. También en el suelo habrá unas indicaciones para mantener la distancia de seguridad entre cada persona, así como las zonas de espera.
La primera parada antes de las votaciones es la mesa donde están las papeletas de los diferentes partidos y los sobres para insertarlas. A este mostrador se acercarán los votantes de uno en un para, una vez cogido su voto, dirigirse a la zona donde estará la mesa de votaciones, a la que deberemos encaminarnos guardando de nuevo la distancia de seguridad.
En el caso de los votantes que deseen hacer uso de las cabinas para escoger la papeleta de una manera más privada también podrán hacerlo. Las cabinas estarán formadas por un doble panel, uno con las papeletas y el otro, a modo de cierre, para que la elección que haga la persona no pueda ser vista desde fuera. Este sistema está diseñado "de xeito que se garanta o secreto do voto sen necesidade de manipular ningún elemento que poida ser tocado por máis votantes, por tanto, non existe cortina para que poidan entrar sen esa manipulación", recuerda el coordinador de prevención.
"Na mesa onde están o presidente a máis os vogais do proceso electoral están garantidas as distancias de seguridade entre eles e, así mesmo, a zona que ocuparán os interventores e apoderados dos partidos", añade Emilio de la Iglesia. Todos ellos portarán mascarilla protectora, al igual que cualquier persona que acceda al colegio. En el momento de realizar la votación, la novedad es que el presidente de la mesa no tocará el documento de identidad del votante "para minimizar os riscos de contaxio e o contacto de obxectos dos cidadáns cos membros da mesa", matiza de la Iglesia. El votante deberá colocarlo en una bandeja que el presidente acercará cara sí para pronunciar el nombre en alto y enseñárselo a los vocales para que comprueben que, según el censo electoral, a la persona le corresponde votar en esa mesa.
Tras la comprobación, el elector introduce el sobre en la urna y, a continuación, se le facilita una nueva dosis de gel desinfectante.
La salida del colegio electoral se hará por una puerta diferente a la de acceso y, de no poder darse esta solución, habrá una señalización adecuada para alternar las salidas y entradas de los votantes.
"Neste momento, todos os colexios electorais foron avaliados polos representantes da Administración que examinan as medidas de seguridade. Todos os colexios electorais, polo tanto, son seguros para o 12 de xullo, un total de 2405. Tan só houbo que facer cambios en pouco máis dun cinco por cento", declara el coordinador de prevención para las elecciones de la Xunta. La semana antes de las elecciones habrá una nueva revisión para comprobar, después de la instalación del mobiliario y de la señalización, que todos los locales cumplen con las garantías.
La demostración realizada este martes en Marín servirá como modelo para toda Galicia. La alcaldesa de la villa, María Ramallo, se acercaba a conocer el trabajo del equipo de prevención de la Xunta y comentaba que precisamente, al estar finalizadas las clases, el colegio de A Laxe era un buen lugar para poder hacer las pruebas pertinentes de cara a la cita electoral.