Sigue el pulso entre el Concello de Pontevedra y los dueños de las atracciones de feria. La subasta por la que el gobierno municipal ha licitado los puestos para las fiestas de Santiaguiño do Burgo y la Peregrina no ha gustado a parte del sector y amenazan no solo con boicotearlas sino también con acudir a la vía judicial para resolver sus diferencias.
En un comunicado remitido a los medios, el colectivo reclama de nuevo una entrevista con la concejala de Fiestas, Carme da Silva, para trasladarle una serie de cuestiones que, según su planteamiento, no están debidamente realizadas en este proceso de subasta.
A pesar de que quedaron vacantes muchos de los puestos ofertados, este colectivo sigue dispuesto a no instalarse en las fiestas de Pontevedra.
Todo ello porque entienden que durante el proceso no han regido los principios de transparencia e igualdad, especialmente porque la apertura de sobres con las ofertas se realizó de forma privada.
Además, cuestionan el criterio seguido para fijar el precio del metro cuadrado y la medición de las plazas que se licitaron, al asegurar que alguna se ha adjudicado a atracciones más grandes que el tamaño de las mismas. Esta cuestión puede ocasionar, aseguran, problemas de seguridad.
Los empresarios concluyen que no descartan acudir a la vía judicial "en defensa de la transparencia e igualdad en el proceso administrativo de licitación pública".