La ciudad de Pontevedra no es ajena a la consolidación de una tendencia general que inclina a los viajeros de todo el mundo a decidirse por alquilar un apartamento para disfrutar de sus vacaciones frente a otro tipo de modelos alojativos; prueba de ello son las numerosas licencias concedidas en los últimos tiempos por el Concello de Pontevedra para levantar edificios enteros dedicados a este fin.
Junto a esta opción, explotada por empresas con sede, en la mayor parte de los casos, fuera de la ciudad, conviven las viviendas de uso vacacional, las VUTS, de propietarios particulares que destinan de media una única vivienda a este uso.
Los datos que maneja la Asociación de Viviendas Turísticas de Galicia (Aviturga) acerca del mercado inmobiliario pontevedrés apuntan a que la ciudad cuenta con un parque de aproximadamente 40.000 viviendas, de las que 31.000 son principales y en propiedad; 8.612 no son principales o están en alquiler; 1.726 son secundarias y 6.886 están vacías.
Según el Registro de la Xunta en Pontevedra ciudad hay 349 VUTs. Para Aviturga este número absoluto carece de valor si no se analiza con el resto de variables y tendencias del parque inmobiliario: vivienda en propiedad, alquilada, vacía, promociones urbanísticas, tipo de vivienda disponible para compra y alquilar, concentración de la propiedad, ubicación, impacto turístico, entre otras variables a considerar.
Aviturga cree que es importante contar con estudios que cuantifiquen el impacto de las VUTs como elemento de promoción de un turismo urbano nacional e internacional de calidad que elige Pontevedra para pasar sus vacaciones.
Se suele mencionar que superan en número a las disponibles para alquiler tradicional, pero esos datos no son comparables puesto que en el caso de las VUT se hace referencia al total y en el de la vivienda para alquiler solo las que están disponibles en una fecha determinada.
Según este mismo Registro podemos asegurar que las viviendas de uso turístico están distribuídas homogéneamente al tratarse de una ciudad con distancias asumibles a pie. Las VUTs están salpicadas por diferentes calles del centro en pequeñas cantidades pero no en las zonas tradicionalmente residenciales para los pontevedreses.
En la calle Peregrina hay 8 VUTs; en Echegaray, 5; en Corbaceiras 5; en la calle Celso García de la Riega, 6; en la Calle Real 6; en García Camba 5; en Ernesto Caballero 5; en Loureiro Crespo 4; en la Rúa Nova de Arriba 7; en Joaquín Costa 6; en Andrés Muruais 2; en la Avda de Vigo 4; en la Avenida de Uruguay 3 y en la Avenida Montero Ríos, 2.
Ponteveda es una ciudad en constante crecimiento turístico como demuestran la continua apertura de albergues juveniles, pensiones convertidas en hoteles y hostels de bajo coste y habitaciones compartidas, favorecido por un contexto urbanístico que anima a destinar edificios enteros a apartamentos turísticos pero muy estricto con las licencias de rehabilitación de pisos individuales.
Aviturga asegura que las viviendas de uso turístico son un agente rehabilitador en zonas céntricas con vivienda vacía sin reformar, en edificios con pocos metros cuadrados de solar que precisan una importante inversión o en edificios sin equipamiento como el ascensor, menos importante para el turista que para el residente habitual.
RENTABILIDAD COMPARADA CON EL ALQUILER TRADICIONAL
La mayor rentabilidad del alquiler turístico está acompañada por una fiscalidad más elevada, una mayor exigencia en la calidad en la habitabilidad del inmueble y, sobre todo, una mayor dedicación puesto que el alquiler por días supone estar pendiente de llegadas y salidas, limpiezas, registro de viajeros, entre otras requisitos aparejados al alquiler turístico.
Muchas de las VUTs no se destinan los 365 días del año a alquiler turístico. En temporada baja, cuando la afluencia del turismo baja con intensidad, muchas cierran sus calendarios en las plataformas, y destinan sus viviendas a alquiler de temporada para estudiantes o trabajadores con contratos mensuales, como está ocurriendo en la docencia y en la sanidad.
A diferencia de otras ciudades, para los pontevedreses vivir en la ciudad es un privilegio al que no renuncian. Un diseño amable, pensado para el disfrute de los peatones, con mucho espacio público y seguro es, sin duda, uno de los principales polos de atracción de turistas pero también un activo para los residentes que, en caso de disponer de más de una vivienda, dedican al alquiler, en cualquiera de sus modalidades, las situadas en el extrarradio, reservando para sí el privilegio de la calidad de vida que ofrece la ciudad.
EL TURISTA QUIERE INDEPENDENCIA
Las VUT ofrecen la comodidad del hogar fuera de casa ya que disponen de sala de estar, cocina, lavadora, espacio para atender a bebes, a las mascotas o, incluso, para equipamiento deportivo, lo que les permite trasladar las rutinas de su vida diaria a las vacaciones. Hay que recordar que los eventos deportivos organizados en la ciudad arrastran a las familias de los participantes, que buscan el confort de un apartamento para alojarse.
El turista además se integra en el barrio haciendo uso de la hostelería, comprando en las tiendas y disfrutando de las actividades que ofrece la ciudad. Tras la pandemia notamos claramente que se ha incrementado el interés por la independencia y autonomía que ofrecen las viviendas de uso turístico y que se están incrementando las reservas para estancias medias y largas.
COMPETENCIA EN CALIDAD Y PRECIO A NIVEL GLOBAL
Las VUTs de Pontevedra tienen muy buena valoración en las plataformas, una buena ocupación con estancias de media y larga duración. La calidad se evalúa tras cada visita con comentarios que comparan la estancia con experiencias de vacaciones previas. La valoración equipara alojamientos situados en cualquier parte del mundo. Si no se ofrece calidad y buen precio, se resienten las valoraciones, disminuye la visibilidad en las plataformas y desciende la ocupación.
DIGITALIZACIÓN DE LA OFERTA TURÍSTICA
Hace tiempo que la digitalización y las plataformas en internet conectaron a los turistas con los destinos de forma directa, alterando a escala global y para siempre muchos de los paradigmas sobre dónde y cómo viajar. Las personas que viajan buscan, eligen y reservan con propuestas que consultan en el móvil. Ya no es tendencia, es la realidad de cómo se planifican las vacaciones de fin de semana o internacionales, manda lo digital.
En Fitur 2023, todos destinos a nivel mundial se afanaban en presentar estrategias para diversificar, desestacionalizar y resdistribuir los beneficios del turismo en sus territorios, compitiendo por la atención en internet de los turistas.
Desde Aviturga consideran que los esfuerzos de las Administraciones tienen que enfocarse en que toda la oferta turística esté disponible de forma digital. “Los destinos competimos en internet, hay que potenciar la presencia en redes sociales, en formato multi idioma y accesible desde el móvil, que es donde los turistas planifican y comparan donde quieren viajar. Ahí está la fortaleza y las oportunidades para hacer más atractiva Pontevedra como destino”, indica Dulcinea Aguín, presidenta de Aviturga.