Integrantes de la Coordinadora para o Estudo dos Mamíferos Mariños de Galicia (Cemma) acompañaron este jueves durante tres horas a dos arroaces que habían quedado confinados en las pozas de agua que se forman entre las lenguas de arena de Lourizán.
Según la información facilitada por Cemma, recibieron el aviso por la presencia de delfines mulares en la desembocadura del río Lérez "con riesgo de varar", de modo que se desplazaron hasta el lugar y, a su llegada, descubrieron que había dos ejemplares que habían quedado por fuera del canal de navegación.
Con la bajamar, estaban confinados en las pozas entre las lenguas de arena de Lourizán y no podían salir, pero desde Cemma destacan que estaban "con agua suficiente para moverse".
Durante tres horas, les estuvieron siguiendo desde tierra y piragua mientras subía la marea, para evitar que varasen. Les acompañaron hasta que salieron, sin detectar ningún problema.
Durante el tiempo que estuvieron haciendo guardia para evitar el varamiento, incluso vivieron escenas en las que los animales estuvieron jugando a llevar un alga en la dorsal.