Apenas un mes después de extenderse a los colegios del centro de la ciudad, la implantación de los Camiños Escolares, que facilita un itinerario seguro para los estudiantes de 7 a 12 años a las horas de entrada y salida de los centros educativos, puede calificarse como positiva, según ha reconocido la concejala de Seguridad Ciudadana, Carme da Silva.
Los datos que manejan Concello y Policía Local reflejan que 412 niños en estas edades, un 21% del total de matriculados en los centros de Álvarez Limeses, Barcelos, Froebel, Doroteas, Campolongo y Vidal Portela, acuden a clase caminando sin la compañía de un adulto.
El porcentaje es mayor en el Álvarez Limeses, al ser el colegio que estrenó este programa en el año 2010.
Estas cifras, que reflejan que el 67% de los niños van a clase caminando, de los que cerca del 32% de ellos lo hacen sólo, evidencian según el intendente jefe de la Policía Local, Daniel Macenlle, "unha boa acollida dos pais e dos centros escolares".
Los responsables del programa esperan que el uso de estos itinerarios seguros mejore a lo largo del curso, comparando el caso de Pontevedra con el de la ciudad italiana de Pésaro, que tras diez años ha alcanzado la cifra de uso 50% de los menores matriculados.
Los Camiños Escolares pretenden fomentar la "autonomía e madurez e previr a obesidade", según defiende Macenlle, con un primer objetivo que, creen, se ha cumplido, "que os nenos vaian andando ao colexio".
Para mejorar los itinerarios, Carme da Silva ha anunciado que se reunirá con diversos colectivos, asociaciones de padres, colegios y también preguntará a los niños para conocer su opinión sobre el funcionamiento del proyecto y "valorar cambios para melloralo".