Julio García Comesaña, conselleiro de Sanidade, comunicaba este viernes la decisión de suprimir a la población general las cuarentenas y el rastreo para contactos estrechos de positivos covid. La medida se aplicará a partir del lunes 7 de marzo.
Sí se mantendrá la medida de control en los denominados "ámbitos vulnerables", esto es, espacios como residencias de personas mayores, centros de día, hospitales, centros para personas con discapacidad y centros penitenciarios.
Carmen Durán Parrondo, directora xeral de Saúde Pública, explicaba la decisión de cambiar el protocolo de vigilancia, aunque insistía en que el manejo de los casos positivos será el mismo, de manera que se les llamará para preguntarles por los síntomas, por cómo deben trasladar la información a sus contactos directos y posteriormente también recibirán una llamada desde Recursos de Atención Primaria para comprobar la evolución y gestionar la baja laboral si es necesaria. Lo que se suprimirá para la población general será la llamada a contactos estrecho, que se realizaba hasta ahora. Estos contactos estrechos no tendrán que aislarse aunque se recomienda que limiten su actividad social. Tampoco se le realizarán pruebas diagnósticas salvo que estos contactos presenten síntomas de la enfermedad.
"¿Nos podemos relajar? La respuesta claramente es no", explicó Durán Parrondo, insistiendo en la necesidad de que la población mantenga las normas sanitarias con el uso de mascarilla en espacios cerrados y en zonas de aglomeración, higiene de manos, ventilación de los espacios y vacunación de aquellas personas que todavía no hayan recibido sus dosis.
El conselleiro manifestó que Galicia "no cambiará de momento" el registro de casos positivos ya sea a través de pruebas diagnósticas en centros sanitarios, en farmacias o a través de autotest. El objetivo, indicó García Comesaña, es ofrecer datos reales.
El máximo responsable de la sanidad gallega insistió en pedir "sentidiño" a la población porque el jueves se detectó un incremento del 26% de casos, este viernes un 16% más respecto al incremento de ayer y la tendencia continúa en ascenso. Las autoridades sanitarias relacionan estos casos con las celebraciones del Entroido y temen que puedan seguir incrementándose ante los actos previstos para este fin de semana. "Los datos de estos últimos días no son tranquilizadores", apuntó.