La Deputación de Pontevedra insta a la Xunta de Galicia a recuperar el Pazo de Lourizán. Así se ha decidido este lunes en el pleno provincial que, con los votos del Partido Socialista y el BNG, ha aprobado una moción en la que culpan al gobierno gallego del abandono que sufre este emblemático edificio mientras que el Partido Popular ha señalado a la administración provincial como la "única responsable" del estado del inmueble.
En la moción, defendida por el socialista Carlos López Font, se reclama al ejecutivo que preside Alberto Núñez Feijóo que "de forma inmediata" cumpla con el convenio en vigor que le obliga a la conservación del pazo.
En esta iniciativa política se incluye la advertencia al gobierno gallego de que si no actúa la Deputación se reserva la posibilidad de acudir a las vías legales para reclamar que la Xunta cumpla la ley de patrimonio. A día de hoy este histórico edificio presenta "problemas de estabilidad estructural, que no está ni mucho menos garantizada" y además "la cubierta está en riego de hundirse".
López Font ha indicado que "la Xunta debe asumir las obras de conservación respetando el conjunto arquitectónico" y ha lamentado que la Deputación lleva "soportando la inacción" y la "falta de respuesta" de la administración autonómica "durante muchos años" y puso como ejemplo que "por no pagar la Xunta ni pagó los recibos del IBI, ni las tasas de recogida de la basura".
La Deputación estima que el importe de la rehabilitación del pazo alcanzaría los 14,2 millones de euros.
Por su parte el portavoz del grupo provincial del Partido Popular, Ángel Moldes, ha recordado que "o propietario do Pazo é a Deputación" e insistió en que "cando lles ofreceron un investimento importante no pazo rexeitárona sen ningún tipo de pudor".
Este histórico edificio presenta "problemas de estabilidad estructural, que no está ni mucho menos garantizada"
El vicepresidente Alfonso Rueda fue quien propuso rehabilitar el Pazo de Lourizán de la mano de la empresa Ence, al considerarlo un buen planteamiento para la administración pública desde el punto de vista económico, técnico y en cuanto a la agilización de plazos. La empresa pastera financiaría gran parte de los trabajos de recuperación del Pazo, destinando cinco millones de euros para la rehabilitación y cinco más para un centro de investigación, sin que se perdiese la titularidad del inmueble.
Ángel Moldes se ha mostrado de acuerdo en que el Pazo de Lourizán "necesita unha actuación urxente inmediata, non se pode perder ese patrimonio" pero entiende que "vostedes son os únicos culpables de que non se interveña" por la "obsesión que algún grupo ten con algunhas empresas desta cidade".
Finalmente el portavoz del BNG y vicepresidente de la Deputación, César Mosquera, ha reprochado a los populares su "defensa numantina de ENCE" y ha criticado que "hai que regalarlle o Pazo a ENCE, igual que tamén se lle regalan os terreos que ocupa".
Mosquera les ha recordado a los diputados del PP que su partido también reclamó a la Xunta la rehabilitación del Pazo de Lourizán cuando gobernaba el bipartito y dijo que ahora "tratan de encubrir a responsabilidade que teñen". "Aquí viñeron a lavarlle a cara á Xunta", concluyó el nacionalista.