La Asociación Ecologista Anduxía, la Asociación de amigos de las embarcaciones tradicionales Os Galos y la Asociación micológica naturalista Liboreiro, han dirigido a la Autoridad Portuaria de Marín una propuesta para convertir el Faro de Ons en un museo.
Desde el año pasado este faro está automatizado y a día de hoy la presencia de los fareros en las instalaciones ya es discontinua, una situación que lamentan estos colectivos desde el punto de vista "cultural y histórico" ya que "los fareros forman parte del patrimonio cultural de la isla de Ons"; tanto por su labor de conservación del actual edificio como por la participación a lo largo de la historia en la vida cotidiana de la isla. Recordemos que, entre otras cosas, ejercieron como profesores en determinadas épocas de la historia de la isla.
Además, el Faro de Ons y los fareros, han sido testigos de numerosos naufragios y parte muy activa en la mejora de la seguridad marítima de la zona.
El propio edificio es un museo en sí mismo ya que conserva muchos elementos originales de su inauguración en 1926; como las baldosas de cerámica de la “Cartuja” que recubren las paredes o los techos decorados con madera de cedro. Además cuenta ya con una importante colección de elementos de gran relevancia histórica y náutica, como por ejemplo la lámpara Chance con capillos de 85 mm que fue la primera en iluminar el faro y que todavía funciona.
Su ubicación también es idónea para la visita ya que además de tener un fácil acceso es un mirador único sobre las Rías Baixas desde el mar. Desde allí se pueden ver las rías de Arousa, Pontevedra y Vigo, con la isla de Sálvora al norte y el archipiélago de Cíes al sur. De hecho, una de las rutas más frecuentadas que hacen los visitantes a la isla en verano es la del Faro por su belleza paisajística y panorámica. Aunque a día de hoy no se puede visitar el propio faro, excepto con reservas concertadas.
En su propuesta, estos colectivos señalan que la amplitud del recinto del Faro de Ons permitiría habilitar otras zonas para uso museístico "para las cuáles no han de faltar contenidos dada la historia marítima de la zona y el privilegiado del lugar". Así, sugieren contenidos como: los naufragios en el entorno de Ons (o en las Rías Baixas), los fareros en las islas, historia de la señalización marítima, entre otras ideas. También se puede dotar de contenidos sobre el Parque Nacional de las Islas Atlánticas (fauna, flora, etnografía, etc).
Recuerdan además que la isla de Ons recibe más de 130.000 visitantes el año y forma parte del Parque Nacional, "por lo que no le faltarían visitantes el museo".
Finalmente, advierten de que cada vez que se automatiza un faro comienza el declive del edificio en sí, ya que el hecho no estar habitado y carecer du uso concreto hace que se vayan deteriorando este tipo de instalaciones. En otros casos, finalizan teniendo un uso privado convirtiéndose en restaurantes o en hoteles.
Por todos estos motivos, estos colectivos entienden que el faro de Ons debería tener un uso público y convertirse en un museo.