Augas de Galicia recibió un total de 11 ofertas para la gestión y el mantenimiento de la depuradora de Os Praceres y sus instalaciones asociadas, para los próximos 2 años.
De las 11 ofertas presentadas a este contrato, licitado por un importe de 10.192.193 euros, 7 de ellas están conformadas por UTE, lo que supone un total de 20 empresas.
El contrato licitado abarca la gestión y conservación de las actuales instalaciones de Os Praceres, que recibe y trata las aguas residuales de los concellos de Pontevedra, Marín y Poio, por un plazo de ejecución de 24 meses. El contrato prevé también la posibilidad de prórroga por un plazo máximo de 36 meses más. Esto eleva el valor estimado a algo más de 24 millones de euros, teniendo en cuenta el importe correspondiente a las prórrogas contractuales y también las variaciones al alza previstas para las cantidades de reactivos a dosificar y de residuos a tratar.
Teniendo en cuenta los elevados costes energéticos del sistema de depuración, el nuevo contrato de explotación excluye la gestión energética, que asumirá la Xunta a través de un mecanismo centralizado, con el objetivo de aminorar el impacto de la factura eléctrica.
La construcción de la depuradora de Os Praceres está declarada de interés general de la Comunidad Autónoma, siendo Pontevedra la única gran ciudad en la que el concello no gestiona la depuradora municipal. El concello de Pontevedra le transfirió a Augas de Galicia en el año 2007 el servicio de mantenimiento de la depuradora de Os Praceres, que recibe y trata las aguas residuales de los concellos de Pontevedra, Marín y Poio.
En aquel momento, las instalaciones se limitaban a ofrecer un tratamiento físico-químico y posteriormente fueron ampliadas para completar la depuración con tratamiento secundario y desodorización, entre otras mejoras.
Desde el otoño del pasado año están funcionando en fase de pruebas los nuevos sistemas de tratamiento en el marco del contrato de las obras de mejora ejecutadas por la Xunta. Tras una inversión autonómica de 16,5 millones de euros, la reforma tecnológica ejecutada permitirá mejorar a corto plazo la depuración de las aguas residuales y dar cumplimiento a los límites de vertido marcados por la directiva europea.