El Partido Popular da por rotas las negociaciones que ha mantenido en las últimas semanas con el BNG para la aprobación de los presupuestos municipales de 2025 en Pontevedra.
El portavoz del PP, Rafa Domínguez, ha dado a conocer esta postura este miércoles, tras comunicársela al grupo de gobierno del BNG, si bien ha querido matizar que aunque las negociaciones "no han llegado a buen puerto", sí que hubo un "diálogo sincero por las dos partes".
Domínguez asegura que el PP no puso líneas rojas en la negociación, sino que "las líneas rojas, en este caso, las pone Lores". Ellos decidiron apartarse de las negociaciones al comprobar que los diez "puntos claros" que llevaban a la negociación no tenían cabida en los presupuestos diseñados por los nacionalistas.
Domínguez quiso agradecer "el buen clima de negociación " y que las conversaciones "fueron en todo momento muy cordiales" con el concejal de Hacienda, Raimundo González, con el que mantuvieron dos encuentros formales e intercambio de correos electrónicos.
El PP realizó diez peticiones y entiende que "el modelo de ciudad que nosotros esperamos que esté plasmado en unos presupuestos de la ciudad no va a estar como nosotros queremos", de ahí que se optasen por romper las negociaciones.
En todo caso, Domínguez reconoce que cualquiera de esos diez puntos el gobierno local puede llevarlos a una modificación de crédito y se abre a aprobar modificaciones de crédito "puntuales". En cuanto a los presupuestos, presentará una enmieda a la totalidad.
El líder del PP señala que ahora al BNG le tocará "negociar con su socio prioritario que es el Partido Socialista".
Da por hecho que el líder del PSOE, Iván Puentes, cederá con la apertura de la avenida Reina Victoria ("no tienen intención de abrir Reina Victoria, lo dijo solo en las elecciones", opina Domínguez"), pero confía en que "no deje en la estacada a los feriantes y a los trabajadores municipales".
Precisamente, la apertura de Reina Victoria y la demanda de los feriantes de trasladar el mercado ambulante a la Alameda son también dos de los puntos que llevaba a la negociación el PP y en los que no llegaron a acuerdo con el BNG.
Otras demandas del PP que consideran que no tuvieron respuesta en la negociación fueron reclamar 500.000 euros para servicios sociales; 400.000 euros para contratar policias locales y bomberos; 150.000 euros para reordenación de tráfico, creación de aparcamientos disuasorios y apertura de Reina Victoria; o 200.000 euros para los clubs deportivos.
Reclababan también "diálogo sincero" con los trabajadores del Concello, mejora en la limpieza de la ciudad, reducción impositiva en unos 400.000 euros en cualquiera de las tasas del Concello; o mejoras en las parroquias y barrios.