Los ayuntamientos de Pontevedra y Barro recibieron la pasada semana el estudio informativo de la prolongación de la autovía A-57 entre el tramo Pilarteiros (Santo André de Xeve) y Barro, conexión con la autopista AP-9 en Curro y con la autovía de O Salnés.
Tendrán un plazo de 30 días para informar este nuevo proyecto de este tramo de la autovía.
En el caso de Pontevedra, en una primera impresión, los técnicos municipales apuntaron que se recogió la única sugerencia que el Concello había presentado a este proyecto, vinculado al entronque de la autovía con el nudo de Curro.
Según informaron fuentes oficiales, aunque no era una competencia propia del Concello, los técnicos municipales entendían que aquella propuesta de Fomento invadía un núcleo rural al aprovechar parte de las calles existentes y suponía el derribo de viviendas, y una gran afectación del terreno.
En el caso de Barro, el alcalde Xosé Manuel Abraldes convocó para este miércoles las 20:00 horas en la Casa del Concello una reunión con los portavoces de los grupos políticos representados en la corporación, miembros de las comunidades de montes de Curro y Portela y representantes vecinales para hablar de la propuesta y consensuar una posición común y acordar las actuaciones a llevar a cabo.