El Tribunal Supremo ha rechazado el recurso de casación presentado por el Concello de Pontevedra contra la sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia que anuló el reglamento aprobado por el gobierno municipal para impedir la construcción de crematorios en el casco urbano de la Boa Vila.
Una modificación puntual del PXOM fue el instrumento legal elegido para prohibir, desde el año 2015, que este tipo de instalaciones funerarias estuvieran a menos de 50 metros de las viviendas. Pero ahora, con esta decisión del Supremo, las empresas del sector podrían pedir licencias para crematorios en cualquier punto de la ciudad.
Con esta situación, según el gobierno municipal, los "máis prexudicados" son los propios vecinos que iniciaron este proceso judicial, que solicitaban que la franja de protección sobre las viviendas fuera aún mayor, de hasta 500 metros.
"Agora quedamos sen nada", ha lamentado Raimundo González.
Los servicios jurídicos municipales estudian ahora el alcance de esta decisión judicial, notificada al Concello el pasado 10 de enero.
Para cubrir este vacío legal, el Concello podría volver a iniciar los trámites para modificar el PXOM, cuyo cambio fue anulado por carecer del estudio ambiental -que no se incluyó porque la Xunta entendía que no era necesario-, o bien estudiar una nueva suspensión temporal de licencias para la instalación de crematorios.