Pontevedra reivindica el "papel esencial" de las mujeres del rural, un 23% de las empadronadas en el concello

Pontevedra
14 de octubre 2020

Pontevedra se sumará este jueves 15 de octubre a la conmemoración del Día Internacional de las Mujeres Rurales con la distribución a través de redes sociales de un manifiesto reivindicativo con el que se busca crear conciencia sobre las luchas de estas mujeres, sus necesidades y su papel fundamental y clave durante la pandemia

Yoya Blanco, Rosa Campos, directora del CIM; y Mercedes Renda, agente de Igualdade Concello de Pontevedra

Pontevedra se sumará este jueves 15 de octubre a la conmemoración del Día Internacional de las Mujeres Rurales con la distribución a través de redes sociales de un manifiesto reivindicativo con el que se busca crear conciencia sobre las luchas de estas mujeres, sus necesidades y su papel fundamental y clave en la sociedad en un momento en el que, a pesar de todas dificultades, estuvieron al pie del cañón en la pandemia, incluso con un trabajo de cuidados no remunerado que se vio incrementado

Así lo anunció este miércoles la concejala de Igualdad, Yoya Blanco, que impulsa este manifiesto junto con el Centro de Información a la Mujer (CIM) bajo el lema ‘Construir la  resiliencia de las mujeres rurales a raíz de la Covid-19’.

Yoya Blanco señaló que, de acuerdo con los datos del Padrón de Pontevedra, el 23% de las mujeres del Concello viven en las parroquias y protagonizan un "papel esencial" y "una lucha silenciosa" a favor de la dignidad de todas mujeres y el desarrollo de la sociedad.​

La intención del Concello es visibilizar a las mujeres del rural que sostuvieron y sostienen en gran parte a vida de los pueblos con sus manos y lograr que se les asegure una protección total de sus derechos para un futuro rural vivo, de igualdad y calidad de vida en base a un equilibrio territorial. 

La Concejalía de Igualdad y el CIM de Pontevedra insisten, además, en que la violencia de género en el ámbito rural se caracteriza por la invisibilidad, la dificultad de acceso a los recursos, la ausencia de recursos especializados y la falta de concienciación social. 

En esta línea, señalan que "vivir en círculos pequeños, donde todo el mundo se conoce y ‘el qué dirán’ tiene más peso, la escasez de oportunidades laborales y la sobrecarga de los trabajos de cuidados, que recaen mayormente en las mujeres, hace que las víctimas de violencia sufran múltiples dependencias del agresor y tarden más en romper su silencio". Así, indican que no significa que en el rural haya más violencia, sino que en el rural las víctimas son más vulnerables. 

El documento demanda que para conseguir la igualdad entre mujeres y hombres en el rural gallego es preciso garantizarles la igualdad de oportunidades en el acceso al mercado laboral, facilitar la conciliación de las esferas personal, profesional y familiar, así como impulsar su capacidad de emprendimiento, promocionando y dinamizando nuevas iniciativas sociales y empresariales que ayuden a las mujeres a romper con los obstáculos que se les presentan en el día a día, a acceder a puestos de responsabilidad y participar plenamente en la toma de decisiones a todos los niveles.