Apenas cuatro días de su debut en la Cumbre del Clima, conocida como COP25, que se está celebrando en Madrid, Pontevedra regresará a esta cita internacional. Lo hará para participar como ponente en una mesa redonda que analizará cómo los municipios pueden prevenir los efectos de la crisis climática en la salud pública.
"Como pontevedrés e como alcalde síntome orgulloso de estar aí", ha señalado el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, que ha celebrado que esta nueva invitación a participar en la Cumbre del Clima que impulsa la ONU demuestre que la Boa Vila es un "exemplo" de calidad urbana, de compromiso ambiental y de fomento de la salud pública.
El evento al que acudirá Fernández Lores está organizado por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social y reunirá a alcaldes de España, Europa y Latinoamérica para debatir sobre cómo las políticas municipales pueden hacer frente a la contaminación atmosférica y al cambio climático.
La mesa redonda, en la que cada ponente tendrá unos diez minutos para explicar su respectiva experiencia urbana, se celebrará el sábado 7 de diciembre en la sala Europa del recinto ferial IFEMA, el centro neurálgico de esta Cumbre Mundial del Clima.
El alcalde ha celebrado que Pontevedra haya sido invitado "por segunda vez" a este evento para hablar de un "proxecto integral" que, a su juicio, se ha convertido en un "referente" de los "efectos positivos" que la transformación urbana tiene sobre la salud.
"Temos moitos datos que poñer sobre a mesa", ha señalado el regidor pontevedrés sobre un asunto que, ha reiterado, es un "tema de preocupación" a nivel mundial
En la invitación recibida por Pontevedra, firmada por el secretario general de Sanidad y Consumo, Faustino Blanco, el ministerio recuerda que la contaminación del aire tiene un impacto "claramente establecido" sobre la salud humana, al aumentar los ingresos hospitalarios por problemas cardíacos, vasculares o respiratorios.
Ante esta situación, señala Sanidad, es "evidente" la necesidad de aplicar medidas "eficaces y responsables" para reducir los costes sanitarios, sociales y económicos derivados de la crisis climática actuando, entre otras materias, sobre la movilidad, el impulso del transporte público sobre el vehículo privado o la promoción de energías renovables y limpias.
Todas las ciudades que participarán en esta mesa redonda han destacado por sus políticas municipales para prevenir los efectos de esta situación de emergencia climática sobre la salud pública de sus habitantes.