Pontevedra, al igual que toda Galicia, pasa a la fase 2 de la desescalada del confinamiento por el coronavirus. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, confirmó este viernes que las cuatro provincias gallegas continúan desescalando y que este cambio de fase se aplicará a partir del próximo lunes 25 de mayo.
La fase 2 supondrá menos restricciones de movilidad y de actividades económicas. Así, a partir del lunes estará autorizado bodas, la apertura de piscinas para uso recreativo, permanecer en las playas más allá de paseos, la vuelta a la actividad de todo el comercio incluidos los situados en centros comerciales, la apertura de cines y teatros o el interior de los establecimientos de hostelería. Consulta aquí algunas de las normas más destacadas.
La Xunta había pedido el lunes el cambio de fase en base a un informe de 107 páginas en el que se detallan las medidas de fortalecimiento que incorporó en las últimas semanas el Servizo Galego de Saúde a la hora de detectar y diagnosticar nuevos casos sospechosos de infección por COVID-19, como la nueva plataforma de seguimiento de contactos de personas infectadas o el refuerzo de los laboratorios de microbiología con los que ya se pueden realizar 6.500 pruebas PCR al día, según informó el conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuíña.
Este viernes, justo antes de que se anunciase este cambio de fase, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ya valoraba que por la situación epidemiológica, por ocupaciones de camas hospitalarias y UCI y por número de contagios toda Galicia cumplía los requisitos y se mostraba "absolutamente convencido" de este paso a fase 2 y destacaba que Galicia está por debajo de la mitad de contagios por 100.000 habitantes de la media estatal.
"Estamos entre 8-9 contagios diarios, durante la fase 0 teníamos 16", valoró Feijóo, que añadió que el porcentaje de positivos está por debajo de 3 por 100.000 habitantes, en algunas provincias incluso por debajo de 1.
De momento, pese al cambio de fase, no se autoriza alas transferencias entre provincias. El informe trasladado por la Consellería de Sanidad para pedir al Gobierno central el cambio de fase ponía el foco en las limitaciones de movilidad existentes en las cuatro provincias gallegas y subrayaba que 306 de los 313 ayuntamientos gallegos no habían tenido casos de transmisión comunitaria durante los tres días anteriores a la elaboración de ese documento.
Feijóo volvió a insistir este viernes en estas limitaciones y señaló que no entiende el objetivo de las mismas, pues "la provincia no es la demarcación correcta para una crisis sanitaria" y añadió que el domingo planteará al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la conferencia de presidentes que haya movilidad entre las provincias gallegas y también que "no hay ningún criterio sanitario que impida que Galicia no tenga una movilidad entre ciudades".