Los alcaldes de Pontevedra, Miguel Fernández Lores, y Ponte Caldelas, Andrés Díaz, firmaron este viernes el convenio entre ambos municipios por el que la capital le servirá agua a las empresas de A Reigosa y en el que establece las tasas que se le cobrará al concello vecino por este suministro.
Ambos ayuntamientos han tratado de simplificar este acuerdo para que fuera la propia empresa concesionaria la que factura, pero esto no es posible ya que la empresa Viaqua como concesionaria del servicio en el Concello de Pontevedra no puede dar suministro a una empresa que se encuentra fuera del término municipal.
El acuerdo fija los mismos precios por el agua que tienen el resto de empresas del polígono de O Campiño, sin ningún tipo de sobrecoste. De modo que Ponte Caldelas será la que ingrese los recibos y después transferirá los fondos a la Pontevedra.
Fernández Lores explicó el "largo" proceso negociador de este acuerdo "necesario" ya que algunas empresas de A Reigosa requerían este servicio.
Por su parte, Andrés Díaz detalló el problema que ha tenido la empresa Aludec la pasada semana cuando por falta de presión de agua suficiente tuvo que parar su producción. Pontevedra puso en funcionamiento 24 horas la estación de bombeo para solventar este contratiempo antes de la firma de este convenio.
Existe una estación de bombeo construida por Xestur pero con "múltiples deficiendias" que la hacían inoperativa en la práctica por lo que Pontevedra asumió su reparación para dejarla en condiciones "esa foi unha boa disposición do concello de Pontevedra que non o tiña por qué facer pero fíxoo", dijo Andrés Díaz.