El gobierno municipal de Pontevedra ha activado este viernes uno de los grandes contratos que le faltaban para completar el cambio a LED de todo el alumbrado público. Será el que renueve toda la iluminación de la parroquia de Lérez y el barrio de O Burgo.
"Iniciamos o camiño deste proxecto", ha explicado el alcalde de Pontevedra, Miguel Anxo Fernández Lores, que ha informado de la salida a licitación de esta actuación, que cuenta con un presupuesto inicial de 1.396.000 euros.
Es uno de los proyectos que, impulsado por el Concello, financiará la Deputación de Pontevedra con cargo a los convenios que ambas administraciones acordaron para este año.
La renovación del alumbrado en Lérez supondrá el cambio de 1.397 luminarias y la instalación de 29 nuevos cuadros de luz. La empresa adjudicataria tendrá nueve meses para ejecutarla.
Esta obra, que incluirá la sustitución de postes o farolas dañadas o la mejora del alumbrado en zonas sensibles como pasos de peatones, permitirá un ahorro en el consumo del 62%, según los cálculos realizados por los técnicos municipales.
El ámbito de actuación abarca las zonas que van desde O Castelo hasta O Burgo, Fontaíña y Couso, Médico Ballina y Juan Bautista Andrade hasta Juan Manuel Pintos y Domingo Fontán, la plaza de Pasarón, Rafael Areses, Alexandre Bóveda, el campus o la Xunqueira de Alba.
Además del ahorro energético, Fernández Lores también ha destacado que este cambio de tecnología a LED evitará la emisión de casi 255 toneladas de CO2 al año.
MÁS DE DIEZ MILLONES EN DIEZ AÑOS
El alcalde ha detallado que, en los últimos diez años, el Concello ha invertido más de 10,5 millones de euros para renovar todo el alumbrado público del municipio. En este tiempo se han cambiado a LED más de 13.000 puntos de luz.
A ellos habría que sumar los que se sustituyeron en las diversas obras de urbanización o reurbanización realizadas a lo largo de todos estos años, por lo que según Lores se superan "amplamente" las 15.000 luminarias que han sido renovadas.
Este esfuerzo ha supuesto que, actualmente, cuente con iluminación LED más de 75% de todo el territorio. Solo quedaría por cambiar parte de las parroquias de Tomeza y Salcedo, la zona norte del centro de la ciudad y el centro histórico, es decir unas 5.000 luminarias.
El regidor pontevedrés ha subrayado la importancia de este tipo de medidas para mejorar la eficiencia energética, reducir la contaminación lumínica y la emisión de CO2, aumentar la seguridad ciudadana, eliminar la luz intrusa en las viviendas o ajustar el alumbrado a los ritmos circadianos de la ciudadanía.