Ponte Caldelas y Vilagarcía recibirán ayudas para retirar símbolos franquistas

Ponte Caldelas
22 de diciembre 2021

Siete ayuntamientos de la provincia, entre ellos Ponte Caldelas y Vilagarcía de Arousa, son los beneficiarios de las ayudas aprobadas por la Deputación de Pontevedra para retirar simbología franquista de diferentes construcción en su espacio público

Fuente lavadero Maceira (Ponte Caldelas) y cruz de la iglesia parroquial de Santa Baia (Vilagarcía) Deputación de Pontevedra

Siete ayuntamientos de la provincia, entre ellos Ponte Caldelas y Vilagarcía de Arousa, son los beneficiarios de las ayudas aprobadas por la Deputación de Pontevedra para retirar simbología franquista de diferentes construcciones en su espacio público.

La diputada de memoria histórica, María Ortega, ha destacado que la importancia de las actuaciones no está en su coste económico, sino en la simbología y en el interés por retirar elementos que están vinculados con la dictadura y por cumplir los principios de "verdade, xustiza e reparación".

En la mayor parte de los casos, las retiradas de simbología corresponden a elementos relacionados con la Falange (FET y de las Jons), el partido único del régimen franquista que dio paso posteriormente al Movimiento Nacional, y que según Ortega ""foi parte da estrutura do réxime e da represión exercida sobre a poboación durante a ditadura".

También hay elemento de las Juntas de Acción Municipal (JAM), que fueron grupos dependientes de la Falange formados en barrios o pequeñas poblaciones con el objeto de llevar adelante acciones sobre el terreno y promover y exaltar el ideario falangista y franquista entre el vecindario.

En el marco de estas ayudas, Ponte Caldelas recibirá unos 10.000 euros para la supresión de la simbología franquista y la rehabilitación de la fuente lavadero Maceira, en Silvoso, una construcción que tiene en su frente una piedra grabada con el yugo y las flechas de la Falange. 

Además, se demolerá la estructura existente, pilares y cubierta para sustituirlas por unas nuevas, y se acondicionará mediante chorreado además de forrar de piedra las paredes de hormigón.

Vilagarcía, por su parte, retirará la cruz arrimada a la fachada de la iglesia parroquial de Santa Baia de Arealonga, para lo cual recibirá unos 6.000 euros.

Según se explica en la memoria del proyecto de retirada, la cruz es un elemento añadido durante la época franquista que carece de autoría e interés artístico.

Los trabajos se realizarán con el asesoramiento y colaboración de la restauradora Iria López Baltar, que abordará inicialmente una prospección de la fachada de piedra.

La fase de restitución de la superficie dependerá del resultado de la fase de retirada, en función de los elementos que estén profundamente incrustados a la fachada, trabajando con bujardas, y valorando la posibilidad de un encaje para la eliminación de las letras en el caso de ser necesario.