El Concello de Ponte Caldelas da la voz de alerta sobre la exigua documentación existente sobre los planes de la Xunta de Galicia para la ejecución del trasvase del río Verdugo. Son apenas cuatro folios y un plano con una única línea indicando el trazado de la tubería propuesta entre el canal de Laforet en A Roca (Ponte Caldelas) y el enganche en la tubería del agua de Vigo, en Aranza (Soutomaior), pasando en el camino por el medio de los pueblos de A Insua y Silvoso.
El gobierno local está "indignado" con la negativa de Augas de Galicia a sentarse a hablar con el Concello de Ponte Caldelas "en una muestra de descortesía institucional indigna de un gobierno autonómico democrático". Ante esta actitud, el alcalde remitió este lunes una nueva carta al director de Aguas, advirtiéndole de la posibilidad de encontrarse con actuaciones legales.
Además, el alcalde Andrés Díaz critica que Augas de Galicia defienda esta obra como de emergencia "lo que permitiría la contratación a dedo y sin licitación" y duda de la legalidad de este procedimiento concreto. La memoria remitida indica que la previsión es trabajar a turnos de 24 horas para finalizarla en tres meses, con lo que, en el mejor de los casos, estaría finalizada en marzo, o mismo en abril o mayo. "¿Cuál es la emergencia de trasvasar en marzo, abril o mayo, cuando ya no hace falta?", se pregunta el alcalde.
"Queda claro que no hay ni proyecto técnico ni estudio de impacto ambiental"
La precariedad de la memoria existente, "en la que queda claro que no hay ni proyecto técnico ni estudio de impacto ambiental", tan sólo permite concretar que la Xunta de Galicia pretende meter una tubería de 500 milímetros durante 6,675 kilómetros con un bombeo inicial y utilizar la carretera autonómica PO-244 cruzando por A Roca, A Insua y Silvoso, hasta entrar en Soutomaior. La tubería abandona la carretera para dividir en dos Aranza, y conectar finalmente en el tubo de suministro que une el embalse de Eiras con la estación potabilizadora de Vigo.
El alcalde de Ponte Caldelas reprocha a la Xunta de Galicia que prevea afectar a la carretera autonómica PO-244, con una fuerte presión residencial, durante casi toda la primavera, "causando restricciones de tráfico y serias molestias al vecindario". Más aún, "sin hacer pública la relación de terrenos a expropiar en un concello como Ponte Caldelas en el que, precisamente, se niega a hacer obras de seguridad vial en otras carreteras autonómicas, como la PO-234".
Otra "circunstancia paradójica" es que la tubería cruzaría A Insua, afectada por fuertes restricciones de agua desde hace meses, así como Silvoso. Más aún, el canal de Laforet parte de un antiguo canal de riego compartido por los vecinos de Silvoso y A Insua, "una infraestructura tradicional que podría ser modernizada y utilizada para paliar los problemas de abastecimiento que tenemos en estas zonas del municipio".
El alcalde denuncia que la Xunta de Galicia pretenda autorizar esta obra por el instrumento del incidencia supramunicipal, pasando por encima de las competencias urbanísticas del Concello de Ponte Caldelas y también de cualquier evaluación ambiental. De hecho, de los 5,5 millones de euros previstos, sólo hay una partida de 45.000 euros para seguimiento ambiental de los movimientos de tierras y gestión de residuos.