Seis agentes de la Policía Nacional recorren a caballo el monte desde el 1 de julio con la misión de prevenir los incendios forestales. Tienen su base de operaciones en la Comisaría de Pontevedra y de allí parten cada día muy temprano, a las 7.30 horas de la mañana, a distintas zonas de la provincia y de Ourense. Bien entrada la noche, sobre las 22.30 horas, y tras recorrer una media de 40 o 50 kilómetros, vuelven a casa.
Los agentes, que patrullan siempre de dos en dos, pertenecen a la Unidad de Caballería de la Policía Nacional de Madrid. Se han desplazado por primera vez a Pontevedra en la denominada operación 'Lumes' junto a otros seis funcionarios que tienen su base en la Comisaría de Santiago de Compostela y actúan en las provincias de A Coruña y Lugo. En total conforman un subgrupo de 12 agentes a quienes el Comité Integrado de Prevención de Incendios de Galicia (CIPIG) asignó labores de prevención en 71 localidades gallegas.
Los agentes Alfonso Silva (con su caballo Latoso) y Carlos Martínez (con su equino Zapatero) ha recibido la orden operativa este viernes de patrullar los montes del entorno de Salcedo. A primera hora recogieron a sus equinos del hipódromo 'Apalaosa' de Marcón y se dirigieron en camión hasta su lugar de trabajo de la jornada. Con una pequeña parada para atender a los medios de comunicación, su día a día es "el mismo de todos los días" y está basado en tareas preventivas.
"Damos largos paseos, vamos a lugares altos, intentamos divisar si vemos humo. Vigilamos los montes y detenemos en el acto a posibles incendiarios", explica el agente Carlos Martínez, natural de León, de ahí que haya bautizado 'Zapatero' a su caballo, en honor al ex presidente socialista del Gobierno, también leonés de nacimiento.
Matiza que recorren el monte en general, el que le asignan cada día desde la Comisaría, pero prestan especial atención a las zonas de difícil acceso, "donde no puede entrar un coche". "Es lo bueno que tiene el caballo, con un vehículo hay zonas a las que es imposible llegar", añade.
La operación se repite a diario, durante todas las horas con luz solar, y hasta el momento no ha tenido ningún contratiempo al margen de la pequeña "sorpresa" de los vecinos con los que se encuentran por el camino. "Quedan un poco sorprendidos al ver a la policía a caballo", pero, en general, pontevedreses y ourensanos les han dado un buena acogida y "colaboración".
La Unidad de Caballería se une a otros efectivos policiales de Seguridad Ciudadana, Policía Judicial y Medios Aéreos cuya misión principal es la prevención, con especial atención a las zonas de más riesgo diagnosticadas por la Xunta de Galicia.
Además, los agentes colaborarán en la detección precoz de incendios, el apoyo a los servicios de salvamento en caso de evacuaciones y la realización de las primeras diligencias de policía judicial como la identificación de testigos, acordonamiento de focos de fuego, recogida de pruebas o detenciones.
La Policía Nacional activa anualmente este dispositivo contra incendios en la comunidad gallega en el que durante el pasado 2012 se realizaron 2.356 patrullas con casi 60 colaboraciones con servicios de emergencias.