- Ti, es da policía?
Así, con gesto tenso, se dirigía un sindicalista encapuchado a Juan de Sola, periodista de Onda Cero y colaborador de PontevedraViva, tras un pequeño enfrentamiento entre un piquete y las dependientas de la tienda Zara Home.
- "ÿ que non te coñezo". Se justificó el sindicalista.
Aclarada la confusión, el miembro del piquete continuó su recorrido. El lanzamiento de un petardo ante el establecimiento de La Ibense en Virxe do Camiño provocó otra discusión con una mujer que pasaba cerca de la cafetería.
La imagen contrastó con la que se produjo minutos después. Los sindicalistas se acercaron al Froiz de Campolongo, a pesar de estar cerrado, lanzaron un petardo por debajo de la verja al interior justo en el momento en el que pasaba inocentemente por la zona una señora mayor. Los miembros del piquete alertaron a la mujer.
- Pare, señora.
La paseante sorprendida continuaba caminando sin saber a qué se referían. Entonces, los sindicalistas se acercaron a ella, le pidieron que se detuviera y que se tapase los oidos. El petardo explotó.
Otra mujer que llevaba el carrito de la compra se dirigió a ellos diciéndoles:
- Cabrones. Si trabajarais...
En esta ocasión no hubo respuesta.
Sí se produjo un enfrentamiento en el Froiz de la calle Rosalía de Castro con la encargada del supermercado. Un grupo de sindicalistas entró en el establecimiento. La dependienta anunció que avisaría a la policía. Uno de los sindicalistas se quedó en la puerta evitando la entrada de los clientes anunciándoles que el supermercado estaba cerrado. Poco tiempo permaneció el piquete en el interior y cuando pretendían salir, la puerta mecánica había sido cerrada por la dependienta. Uno de los sindicalistas se tiró al suelo y la tensión se mantuvo durante unos minutos hasta que la dependienta abrió la puerta. Como respuesta recibió un "quedeime coa túa cara".
Ese tipo de amenazas funcionaron a lo largo de la mañana, cuando en algunos casos llegaban a las tiendas y alertaban: "O bajas la verja tú o te la bajamos nosotros".
Más discusión todavía se produjo en la Plaza de San Xosé en la tienda deLos sueños de Alë y Patt. Los manifestantes reclamaron el cierre de la tienda y ante la negativa de la dependienta que salió a la puerta grabándolos con un móvil, uno de los sindicalistas se abalanzó sobre ella. A partir de ese momento comenzó una fuerte discusión entre el grupo y las personas que se encontraban en el establecimiento que amenazaban con llamar a la policía.
Todo quedó en nada. El piquete se dirigió hacia la Plaza de A Ferrería porque se acercaba la hora de la manifestación.