Peregrina sin toros. Suspendida la feria taurina de Pontevedra

Pontevedra
17 de julio 2020

En un escueto comunicado dirigido a los medios de comunicación, la gerencia indicaba que "Tras la consulta con las correspondientes autoridades y ante el riesgo evidente del Covid'19, se suspende la Feria Taurina de La Peregrina 2020"

Eduardo y Pablo Lozano durante la presentación de la Feria Taurina 2018
Eduardo y Pablo Lozano durante la presentación de la Feria Taurina 2018 / Mónica Patxot

Después de muchos rumores y tras barajar las diversas opciones que la situación sanitaria podría permitir, la gerencia de la Plaza de Toros de Pontevedra comunicaba a medio día de este martes su decisión definitiva de suspender la edición de este año 2020 de la Feria Taurina de La Peregrina.

En un escueto comunicado dirigido a los medios de comunicación, la gerencia indicaba que "Tras la consulta con las correspondientes autoridades y ante el riesgo evidente del Covid'19, se suspende la Feria Taurina de La Peregrina 2020".

A continuación, la nota continuaba diciendo: "Lo hacemos con pesar y la mayor responsabilidad en beneficio de la fiesta y la afición de Pontevedra", para finalizar indicando que "Deseamos que esta situación sanitaria pase cuanto antes y poder pensar ya en la organización de la Feria de La Peregrina 2021".

Puestos en contacto con uno de los propietarios de la Plaza de toros, Eduardo Lozano, que ya se encuentra en Madrid tras finalizar en Pontevedra sus intentos de llevar a buen puerto la organización de al menos una corrida (aunque se llegó a especular con que fuesen dos), comentaba a PontevedraViva que las condiciones que se le imponían para celebrar los festejos hacían inviable su organización: "Una distancia de 1,5 metros en los tendidos y una capacidad máxima de 800 espectadores es impensable, no sería rentable económicamente. Las autoridades no quieren posibles problemas y la empresa sería responsable de cualquier rebrote que pudiese producirse como consecuencia de la apertura de la plaza. Ante ésto, digamos que me lo pusieron para salir corriendo".

"Además -continuó Eduardo Lozano-, en el peor de los casos, si se produjese otro rebrote a dos días de la celebración del festejo y con todo preparado nos lo podrían suspender, con lo que las pérdidas serían inasumibles. Con 40 años que llevamos gestionando la plaza de Pontevedra me jode tener que suspender por vez primera, pero no nos queda más remedio. Eso y confiar que el año que viene podamos volver con más fuerza".

El empresario manifestaba que las gestiones para poder televisar las corridas estaban en buen camino, e incluso que el cartel podía acoger a la mayoría de las grandes figuras del escalafón: "Este año, con la gran mayoría de ferias suspendidas, estaban disponibles casi todos, pero qué se le va a hacer, no queda más que aguantar y confiar en que dentro de un año todo vuelva a la normalidad".

Como ganadero, preguntado por las consecuencias que la suspensión de festejos están ocasionando para las cuadras, Lozano comentó: "Muchas ganaderías no van a poder aguantar. Los costes de seguir alimentando a los animales durante todo un año son muy elevados, y además, como sólo se pueden lidiar toros hasta una edad de quinqueño, nos obligan a mandar directamente al matadero todos aquellos animales que tengamos en las cañadas que ahora tengan ya cinco o más años, porque de aquí a un año no serán lidiables y eso supone unas pérdidas que más de uno no podrá aguantar".