Desde anoche el teléfono de Xosé T. Cannas, más conocido como Pepe Vieira, no deja de sonar. "Me lo esperaba. Es parte de mi trabajo", afirma el cocinero pontevedrés visiblemente agotado. Solo ha podido dormir un par de horas.
De camino a Galicia, con su segunda Estrella Michelín bajo el brazo, asegura a PontevedraViva que se trata de un premio "muy deseado" y que refrenda los valores con los que abrió su restaurante en Raxó, Camiño da Serpe, hace ya 22 años, situado en plena naturaleza.
"Lo recibimos con el mismo espíritu que teníamos cuando empezamos y entendemos que es un triunfo a nuestra constancia y a los valores que defendemos", sostiene Vieira, que se ha convertido en el segundo cocinero gallego 'biestrellado' por la prestigiosa guía gastronómica.
Aunque el premio lleva su nombre, él tiene claro que todo se lo debe a su equipo. "Es un clásico pero es la verdad. Yo soy la cabeza visible de un montón de gente", afirma convencido, orgulloso de que todos ellos compartan su visión sobre la gastronomía.
La suya, conocida como "la última cocina del mundo", un concepto que va más allá de lo culinario y cuenta una historia con cada plato. Una experiencia única que permite descubrir Galicia y sus orígenes a través de una propuesta gastronómica creativa.
"Nosotros aprovechamos el espacio natural en el que estamos que es brutal y una despensa que es insuperable", explica Pepe Vieira, "intentando trasladar toda esa luminosidad al plato" y reivindicando sus raíces rurales. "Así de sencillo", sentencia.
Cocinar con el pescado y el marisco que proporcionan las rías gallegas, con las carnes que se crían en los verdes pastos del norte o con las verduras que da esta tierra, subraya Vieira, "para un cocinero es como para un niño ir a EuroDisney".
Eso sí, reconoce que ser fiel a esa despensa es también una gran responsabilidad porque "tenemos que ser muy respetuosos con el producto y saber entenderlo". Esta segunda Estrella Michelin, avanza el cocinero pontevedrés, "no va hacer que nos apartemos de este camino".
"Es lo que nos ha traído hasta aquí", reitera Xosé T. Cannas, que celebra que poco a poco la cocina gallega vaya ocupando el lugar que se merece dentro del olimpo gastronómico nacional, tras lograr situar en él a dos nuevos restaurantes -Ceibe (Ourense) y O Pazo (Padrón)-.
Conseguir que los cocineros de Galicia "vayan pasando de pantalla", asegura, contribuye a que "los que vienen detrás vean que es posible" triunfar desde los fogones del Atlántico gallego.
El compromiso con la sostenibilidad, que la Guía Michelin ha premiado con estas dos Estrellas y una Estrella Verde, es el mismo que Pepe Vieira busca trasladar ahora al proyecto que "complementa la experiencia gastronómica" de su restaurante.
Su "hotel de naturaleza" ya es una realidad, catorce habitaciones repartidas en bloques individuales a los pies del restaurante, en una ladera montañosa con vistas privilegiadas sobre la ría de Pontevedra, "que contribuye a trasladar la sensación de estar en plena naturaleza".
Aunque ha sido un "parto complicado", concluye el chef gallego, "el hotel ya forma parte de un todo", una propuesta gastronómica que, junto con el Culler de Pau que regenta Javier Olleros en O Grove (Pontevedra), son la referencia ya consolidada de la nueva cocina gallega.