El El chef pontevedrés estrella Micheíin Pepe Solla será este año 2020 el pregonero de las fiestas de la Peregrina, que el próximo sábado 8 de agosto dará inicio a la semana grande de las fiestas del verano de Pontevedra con una imagen tan atípica como la propia pandemia sanitaria del coronavirus que ha cambiado toda la programación festiva de la ciudad.
La lectura del pregón dejará el habitual balcón del Pazo de Mugartegui para instalarse en el palco de la música de la Alameda y se hará a partir de las 12 de la mañana ante un público sentado y con control de aforo, como todas las actividades organizadas en las últimas semanas en el marco del programa ‘Pontevedra vívese’.
La concejala de Festas de Pontevedra, Carme da Silva, dio a conocer este lunes el nombre del pregonero y explicó que "reúne todas as características" para ser el responsable del tradicional pregón, por su "prestixio profesional", como fundador del grupo Nove y con la Estrella Michelín de su restaurante Casa Solla de Poio, pero también por su papel como "embaixador de Pontevedra e da súa comarca por onde vai", por poner "o prestixio da resturación galega ao máis alto nivel" y por su papel solidario durante la pandemia.
Así, destacó que, junto a su equipo, cocinó para los usuarios del comedor de San Francisco de Pontevedra tres días a la semana durante los tres meses más duros de la pandemia y el confinamiento, dando comida a 150 personas diarias. Tuvo "un papel activo moi importante durante os peores momentos" y representa el "comportamento solidario e responsable da sociedade" durante el estado de alarma.
Además, Pepe Solla hablará desde el balcón de la Alameda representando a un sector, el de la hostelería y la restauración, que está viviendo "con moitísimas dificultades" el proceso de recuperación de la actividad económica, tras permanecer meses cerrados y ahora hacerlo con restricciones y en medio de una crisis sanitaria y económica global.
Pepe Solla es, para Carme da Silva, "a persoa perfecta para facer o pregón" en un verano en el que se ha tenido que reinventar, en general, "como afrontar a vida" y en el que las propias fiestas se han tenido que reinventar. El propio pregón se ha redefinido al hacerse en un espacio más amplio y abierto que da a la Alameda un espacio central de la programación festiva.
El chef se mostró muy agradecido por el honor de leer el pregón, pues considera que "unha das cousas máis bonitas que che poden pasar é que os teus veciños, a xente que te rodea, te chame e che pida cosas" y se muestra "encantado" y "honrado" de haber sido escogido en un año "distinto, especial" como este.
Además de aplaudir la nueva fórmula festiva de Pontevedra este verano, en la que las actividades se han repartido por toda la ciudad, "unha forma de que a cidade se sinta activa e viva", también considera que es una buena elección el cambio del pregón al palco de la música de la Alameda, porque el lugar es "moi bonito" y hace referencia a un de sus hobbies, la música. En todo caso, sí ha aclarado, a preguntas de los periodistas, que no llevará su guitarra.
En relación con su papel solidario durante la pandemia, destacó que le gusta pensar que el trabajo realizado por él y su equipo puede servir "para que máis xente se faga consciente de situacións que neste momento se agravaron, pero que non quere decir que deixen de existir" superados los momentos más duros de la crisis sanitaria.
El pregón todavía no lo tiene escrito, sino que, como le sucede cuando se pone ante los fogones, "cústame programar os platos e cando chegan os produtos é cando empezo a cociñar". En este caso, lleva días dándole vueltas y pensando.