De manera telemática, después de cancelar su visita a O Grove por haber dado positivo en Covid-19, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha participado este sábado en la clausura del Foro La Toja donde ha reivindicado la importancia de pagar impuestos para mantener el Estado de Bienestar.
Pedro Sánchez ha ocupado la mayor parte de su discurso en hablar de política tributaria defendiendo una "fiscalidad justa" para promover y mantener servicios públicos de calidad que tienen que ser costeado por "todos los ciudadanos" en proporción de sus ingresos.
Para el presidente del Gobierno, "los costes de la crisis no pueden recaer en clases medias y trabajadoras como en la crisis financiera. Esta vez, los más pudientes son los que tienen que arrimar el hombro".
El presidente ha criticado a los "brujos que traen fracasadas recetas" que "proclaman que el dinero está mejor en el bolsillo de los ciudadanos" y a los que señaló como "portavoces de la insolidaridad fiscal".
"No podemos tener un Estado de Bienestar como los países nórdicos con una recaudación similar a países menos desarrollados económicamente", ha argumentado. "La pregunta es qué estado del bienestar queremos. Es tiempo de elegir y las opciones son claras: ¿lo fortalecemos o lo debilitamos?", ha dicho Pedro Sánchez.
"El debate no es si pagamos más impuestos, sino a qué tipo de sociedad aspiramos" ha reiterado el titular del Ejecutivo central.
"El debate no es si pagamos más impuestos, sino a qué tipo de sociedad aspiramos", dijo Pedro Sánchez
"Para apreciar lo que uno tiene, no hay nada como saber lo que cuesta", ha afirmado antes de poner algunos ejemplos como los trasplantes de corazón, que cuestan 90.400 euros; el coste medio de una hospitalización, que asciende a 5.000 euros; o el de un procedimiento quirúrgico, que es de 7.500 euros, así como el coste de una cama UCI que alcanza los 19.000 euros. "Sólo con la subida del IRPF a los ricos cubrimos los 172 millones de refuerzo extraordinario a la atención primaria. ¿Dónde está mejor el dinero, en unos pocos bolsillos o en la atención primaria que salva vidas?".
Y en referencia al Partido Popular ha añadido que organismos "nada sospechosos de ser pseudocomunistas" como la OCDE o el Banco Central Europeo, "cuestionan la irresponsabilidad fiscal de la que algunos hace gala".
BORRELL
También ha intervenido este sábado en la Illa da Toxa el alto representante de la Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, que ha defendido la necesidad de un "rearme coordinado" para preparar al bloque comunitario para una posible guerra.
"Mi tarea es planificar ese desarrollo militar", ha explicado un Borrell convencido de que la Unión Europea debe "integrar la guerra en su horizonte existencial e integrar las fuerzas armadas" evitando las "duplicidades y redundancias" que ahora tienen los ejércitos europeos. "Gastamos cuatro veces lo que gasta Rusia y lo mismo que gasta China y seguramente de forma menos eficaz", ha argumentado.
"Vivimos en un mundo peligroso. Vivimos en un jardín rodeado de jungla. No basta con levantar mundos protectores. Tenemos que comprometernos más con la jungla", ha afirmado. En ese sentido, "los instrumentos militares no son un capricho". "Son necesarios, imprescindibles para la supervivencia", ha subrayado.
El jefe de la diplomacia europea ha criticado los referéndums "inválidos" de anexión a la Federación Rusa en las regiones del este de Ucrania. Una "pantomima" de votaciones "celebradas de la noche a la mañana, en medio de un país en guerra, sin censos ni garantías".
"Rusia ha perdido ya la guerra en términos morales y políticos, pero Ucrania todavía no la ha ganado", ha dicho Josep Borrell. "La guerra hay que acabarla bien para construir la paz. La guerra tiene que acabar con que Ucrania pueda defender su integridad territorial y la recupere y que Rusia reconozca su culpabilidad moral. No podemos pedir menos, no podemos flaquear porque lo que está en juego no es la integridad territorial de Ucrania. Lo que está en juego es nuestro modelo de vida", ha advertido.